La Biblioteca Rivadavia se enfrenta a tiempos difíciles

En la Biblioteca Popular Bernardino Rivadavia, observan “un panorama preocupante” para el 2024, a raíz de la situación económica imperante y porque no se contará con el subsidio de la Comisión Nacional de Bibliotecas Populares (CONABIP). Además, la institución se ha quedado con la mitad del personal que sería necesario para su funcionamiento y el valor de la cuota que pagan los socios ya no se corresponde con el impacto inflacionario actual.

La entidad es la más grande entre las que cuenta Cipolletti, con unos 66.000 libros inventariados y una cantidad de socios cotizantes que promedia las 600 personas. Por otro lado, cuenta con la alternativa comunicacional que propone la radio FM Mural e impulsa todo el tiempo variadas actividades culturales abiertas a la comunidad.

Patricia Maneiro es la nueva presidenta de la comisión directiva de la Biblioteca. Asumió hace unos días y sucede en el cargo a Franco Ávila Gross. Su mandato se extenderá por dos años, que es el período establecido para la renovación de autoridades.

La dirigente manifestó este martes que durante el año en curso se cumplieron los objetivos programados, lo que incluyó la realización de diferentes refacciones al edificio de la institución. Indicó que se concluirá el trabajo anual el viernes y no se volverá a abrir al público hasta febrero. En enero, se aprovechará el tiempo para pintar los interiores del inmueble.

Expresó que desde la CONABIP ya se les anticipó que en 2024 no se contará con el subsidio que se envía a todas las bibliotecas populares de Argentina para su funcionamiento. Esto supondrá, en el contexto de la crisis económica nacional, más dificultades que enfrentar, por lo cual se redoblarán esfuerzos para alcanzar las metas fijadas para el año que viene.

“En los gobiernos neoliberales como el actual, la cultura no suele ser una prioridad. Ya nos ocurrió en el exgobierno de Mauricio Macri, en el cual también se redujeron los subsidios”, resaltó.

Por eso, ya se han hecho contactos con la Secretaría de Cultura provincial, que está a cargo de Martín Fraile Milstein, para estrechar vínculos y dar continuidad al aporte que se hace a la institución y que ayuda a la materialización de sus propuestas. Además, se está gestionando una reunión con las nuevas autoridades del Municipio, que también colabora con la entidad.

Actualmente la Biblioteca cuenta tan solo con tres empleados, de los cuales dos perciben salarios de la Provincia y uno tiene un sueldo que, en parte, paga Provincia y, en parte, la propia institución. Para su labor diaria, requeriría, al menos, de seis empleados. Aparte, se necesita de un operador para la radio. El personal disponible se completa con un trabajador que envía el Municipio para tareas de limpieza. El compromiso de todos permite garantizar el quehacer cotidiano.

Evaluarán suba de la cuota social

En la actualidad, la cuota que abonan los socios de la Biblioteca Rivadavia alcanza un monto de 1.500 pesos. Es el precio aproximado de un alfajor en algunos locales comerciales. Se trata, pues, de una cifra acotada y que posiblemente se subirá por los desafíos que presenta la enorme inflación imperante.

Se prevé evaluar la situación en febrero, tras el cierre al público de la institución en enero. El nuevo valor se empezaría a cobrar en marzo. No quedaría otra alternativa para asegurar el funcionamiento.