El clima en Cipolletti

icon
24° Temp
35% Hum
LMCipolletti hombre

La increíble excusa de un hombre para no pagar alimentos a su hijo

Un hombre quiso que las ayudas estatales contaran como parte de la cuota alimentaria. La Justicia rionegrina intervino y resolvió sobre el caso.

Un fallo del Juzgado Multifueros de El Bolsón dejó en evidencia una situación insólita: un hombre que, al ser demandado por alimentos, solicitó que las asignaciones familiares y la Tarjeta Alimentar que percibía por su hijo fueran consideradas parte de su obligación económica.

La jueza interviniente desestimó el planteo y recordó que los beneficios otorgados por el Estado son un derecho del niño, no un esfuerzo del progenitor.

Te puede interesar...

La resolución fijó una cuota mensual de manutención tomando como referencia la canasta de crianza elaborada por el INDEC, la cual estima el costo promedio de las necesidades de un niño o niña según su edad. El fallo fue contundente al mencionar que los aportes estatales no suplen el deber legal ni moral del padre de sostener económicamente a su hijo.

cuota alimentaria
El hombre argumentó que la mamá ya cobraba ayudas sociales para el menor, por lo que él solo podía

El hombre argumentó que la mamá ya cobraba ayudas sociales para el menor, por lo que él solo podía "contribuir" con un monto extra ínfimo.

Una madre sola frente a la crianza

La causa se inició luego de que la madre denunciara que el hombre no contribuía de manera regular ni asumía responsabilidades cotidianas. Explicó que vive con el niño, estudia en una universidad pública, trabaja de forma independiente y cubre por sí sola todos los gastos de vivienda, alimentación, educación, transporte y salud.

Agregó además que sus ingresos resultaban insuficientes, por lo que debió recurrir a la ayuda económica de familiares y amistades para sostener la rutina del menor.

El planteo del padre: “Ya aporto con las asignaciones”

Al ser notificado, el hombre ofreció una cuota de $150 mil. Alegó que sus ingresos provenían de trabajos esporádicos, que no tenía bienes registrados ni empleo formal y que llevaba “una vida austera”.

Intentó justificar su propuesta señalando que la madre tenía la tarjeta de débito por la cual se cobraban las asignaciones familiares y la Tarjeta Alimentar. Afirmó que si se sumaban esos beneficios estatales a lo que él ofrecía, el aporte superaba la mitad del valor estimado de la canasta de crianza.

Sin embargo, el argumento fue descartado de plano. La jueza aclaró que los beneficios sociales no pueden computarse como parte del cumplimiento de la obligación alimentaria, ya que “son un derecho del niño destinado a garantizar su bienestar, independientemente del cumplimiento o incumplimiento de los padres”.

El Bolson
La madre inició una acción legal en la Justicia rionegrina.

La madre inició una acción legal en la Justicia rionegrina.

La situación acreditada en el expediente

Durante el proceso se constató que el niño reside con su madre, asiste a una escuela pública y realiza actividades deportivas. También se comprobó que el padre no cumple un rol activo ni económico en su crianza.

Aunque en otra causa se había dispuesto un régimen de cuidado compartido, la medida nunca se concretó. En cambio, la mujer demostró que se hace cargo de todas las tareas de cuidado: traslados, reuniones escolares, alimentación, vestimenta y recreación.

La jueza analizó además la situación económica de ambos. La madre explicó que su ingreso es inestable y que su panorama se agravó tras un incendio que afectó el lugar donde trabajaba. Pese a ello, continúa estudiando y sosteniendo sola la crianza del niño.

El padre, por su parte, no presentó documentación que acreditara sus ingresos, no ofreció pruebas concretas sobre su actividad laboral y, tras la renuncia de sus defensores, ni siquiera designó nuevo abogado.

Tarjeta Alimentar.jpg
La Justicia obligó a responsabilizarse como padre y aportar una cuota económica hasta los 21 años.

La Justicia obligó a responsabilizarse como padre y aportar una cuota económica hasta los 21 años.

El fallo: una canasta completa hasta los 21 años

Ante ese escenario, la magistrada resolvió fijar una cuota mensual equivalente a la canasta de crianza completa para la franja etaria de 6 a 12 años, según la referencia del INDEC. Además, estableció que la obligación se extenderá hasta que el hijo cumpla 21 años, salvo que se modifique por vía judicial.

El caso no solo marca un precedente sobre el valor jurídico de las asignaciones sociales, sino que también expone el límite de una argumentación que pretendía trasladar al Estado la responsabilidad paterna.

Leé más

Noticias relacionadas

Dejá tu comentario