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En el feriado, la ciudad se llenó de borrachos al volante

El récord fue el de un automovilista que registró 3,13 g de alcohol en sangre.

El Municipio suspendió, durante más de dos semanas, los controles de alcoholemia ya que estaban calibrando los alcoholímetros. En su regreso, los resultados fueron alarmantes.

Aprovechando que ayer no era día laboral por tratarse de un nuevo aniversario de la Revolución de Mayo, muchos cipoleños optaron por salir o juntarse con amigos el martes por la noche. Y, como era de esperar, el alcohol corrió como reguero de pólvora y fueron muchos los borrachos al volante detectados.

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En total se labraron 37 actas contravencionales, mientras que se procedió al secuestro preventivo de 12 vehículos por dar positivos los controles de alcoholemia. El caso más preocupante fue el de un automovilista que manejaba con 3,13 gramos de alcohol en sangre al momento de realizarle el test. "Casi no se podía mantener en pie", confesaron inspectores municipales. Los operativos fueron realizados, de manera conjunta, por el área de Tránsito de la comuna y por efectivos de la Regional V de Policía.

De los rodados secuestrados, 8 fueron autos, incluyendo a dos taxis, uno de Cipolletti y el otro de Neuquén. En tanto, los cuatro restantes fueron motocicletas. Además, se retuvieron 11 licencias de conducir por alcoholemia positiva y otras cuatro por estar vencidas, según se informó oficialmente. Las estadísticas en una sola noche de controles generaron gran preocupación entre las autoridades municipales, que adelantaron que los operativos serán cada vez más rigurosos para tratar, así, de prevenir accidentes producto de la ingesta de bebidas alcohólicas.

Los controles llevados adelante por Tránsito son itinerantes, realizándose en diferentes puntos de la ciudad conjuntamente con las fuerzas policiales, con el objetivo de tomar por sorpresa a los infractores y que éstos no puedan eludirlos.

Graduaciones
Desde Tránsito se informó que el grado más alto de alcohol en sangre detectado entre los automovilistas fue de 3,13, mientras que el infractor con menor graduación registró 0,53, cuando lo máximo permitido es 0,50. En cuanto a los motociclistas, en tanto la máxima fue de 0,87 y el mínimo dio 0,63 gramos de alcohol en sangre. En este caso, el máximo tolerable es 0,20.

Tanto desde el Municipio como desde la Provincia han expresado su preocupación por este tema, por lo que impulsan campañas para generar conciencia en torno al peligro que implica, para su propia integridad física y para la de terceros, conducir en estado de ebriedad. Por ese motivo, también buscan multiplicar y vigorizar los operativos en las calles.

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