María Emilia Soria y la Ruta 22 en Cipolletti: "El año que viene no se va a ejecutar"
La intendenta de Roca habló del acuerdo de Rodrigo Buteler con Nación. También analizó el futuro del PJ y se mostró “dispuesta a olvidar todo lo que nos pasó”.
“Lo que firmaron en Cipolletti, el año que viene no se va a ejecutar. No tienen presupuesto”, dijo este viernes la intendenta de Roca, María Emilia Soria, sobre las obras para terminar la ampliación del tramo 5 de la Ruta 22.
La jefa comunal sostuvo que el acuerdo sellado semanas atrás por el intendente cipoleño, Rodrigo Buteler, y las autoridades de Vialidad Nacional, no será de aplicación en un futuro inmediato, porque no existen partidas que garanticen el financiamiento de esos trabajos.
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Ese entendimiento entre la Municipalidad de Cipolletti y Nación contempla la ejecución de un paso elevado en el cruce de la Ruta 22 con la calle Julio Dante Salto, camino hacia la Isla Jordán, un diseño que había sido rechazado por la anterior gestión local, encabezada por Claudio Di Tella.
Y esta mañana Soria también admitió la posibilidad de rever posturas rígidas de años anteriores, en pos de que se termine de una vez el plan de ampliación de la Ruta en todo el Alto Valle.
“Nosotros estamos hablando (con Vialidad Nacional), ya pudimos ver un anteproyecto, que es distinto a todo lo que veníamos hablando. No quiero adelantarme mucho más porque todavía estamos haciendo unas consultas finales. Pero bueno, entiendo que ya no queda alternativa para nada más”, dijo la intendenta durante una entrevista con CNN Radio Roca.Fue allí cuando la dirigente del peronismo introdujo la situación de Cipolletti, advirtiendo que no pensaba anticipar sus decisiones cuando todavía no aparecen garantizados los recursos para terminar el tramo 5, que va desde Fernández Oro hacia el oeste.
“Entiendo que para el 2025 no hay presupuesto ni siquiera para el tramo de Cipolletti. Así que tampoco me voy a adelantar a tomar definiciones”, planteó.
El estado de la Ruta 22 en Río Negro
Soria no sólo cuestionó la falta de fondos para avanzar con la ampliación de la Ruta 22 en el Alto Valle. También resaltó lo que está ocurriendo con la rotonda de acceso a Choele Choel, en el Valle Medio.
“Ayer pasé por ahí, casi me mato. Es un desastre. Me imagino, me pongo en la piel del intendente, que están desde diciembre prometiéndole que la van a terminar”, señaló.
La referencia sobre su paso por ese sector tiene que ver con el viaje a Viedma que concretó la mandataria, para realizar gestiones ante el gobierno provincial.
La política interna del PJ
Además de esas reuniones, por la tardenoche participó del acto por el Día de la Lealtad Peronista que organizaron agrupaciones de la capital rionegrina, entre ellas la liderada por el exlegislador y dirigente de Sitrajur, Pablo Barreno.
“Soy una militante y una justicialista que siempre trabaja en pos de la unidad. Hemos tenido experiencias, como la última, que, si hubiéramos ido todos unidos, que es lo que intentamos hasta el último momento, hubiéramos dado una pelea digna. Y miren, no sé si no llegábamos ahí a arrimar el bochín. Lo cierto es que cada vez que se esmeran por separar al peronismo, perdemos todos, esa es la realidad”, reflexionó.
Y consultada sobre el futuro del partido y sus proyecciones personales, dijo no querer “que el peronismo de Río Negro termine siendo el ejemplo del radicalismo: furgón de cola de las decisiones de otro, amiguero de las malas decisiones. La verdad que no, no quiero eso para mi movimiento”.
También advirtió que en el acto de Viedma notó “mucho enojo, porque nos presionaron” y que hubo “mucho volver al pasado”, pero ante eso, “mi propuesta es otra, y creo que tenemos que volver a unirnos”.
“Yo estoy dispuesta a olvidar todo lo que nos pasó, hacerme cargo también de lo que me corresponde, pero en pos de que podamos volver a caminar más fuerte porque el contexto es otro”, concluyó.
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