La Muni comenzó a desmantelar un antiguo galpón del ferrocarril

El municipio local comenzó a desmantelar un antiguo galpón de chapa que se encuentran en el predio ferroviario, sobre la calle Tres Arroyos, a la altura del Complejo Cultural Cipolletti (CCC), donde funcionaba un taller mecánico. También una pequeña vivienda que habitaba una familia. Ambos ocupantes aceptaron trasladarse a otros inmuebles, tras consensuarlo con las autoridades comunales.

Con máquinas y herramientas, el personal inició las tareas durante la mañana de este viernes, que incluye también el retiro de residuos.

El intendente Rodrigo Buteler estuvo en el lugar y anticipó que el espacio será destinado a una playa de estacionamiento que será de gran utilidad para el público que concurra al recinto cultural.

“Hoy es un día histórico” destacó el jefe comunal, y precisó que es el comienzo de “un proceso de transformación de todo el paseo verde” que irá desde el CCC hasta el antiguo Centro Cultural de la calle Luis Toschi, que se encuentra en remodelación.

Agregó en el mismo sentido que “viene un nuevo Cipolletti con planeamiento urbano, con desarrollo, pero sobre todo con una mirada de futuro”.

El proyecto total establece la creación de un predio público con sectores parquizados, bicisenda e iluminación, entre otras mejoras destinadas a la recreación de vecinos y visitantes.

La iniciativa permitirá recuperar un amplio espacio de terreno -de unos 800 metros de extensión- que se encuentra a escasas cuadras del centro comercial y que, durante muchos años, se mostró deslucido.

Los cambios contemplan revalorizar la relación ciudad-ferrocarril como parte integral del nuevo polo cultura y recreativo.

Acuerdo con ocupantes

Los galpones ubicados en proximidades de la calle Luis Toschi se encuentran ocupados por decenas de familias. El municipio y la provincia alcanzó un acuerdo tiempo atrás para que se trasladen a las viviendas que les construirán en el Distrito Vecinal Norte. Son 31 unidades que ya fueron asignadas.

Una vez que se muden, el municipio procederá a recuperar el área y añadirla al plan de parquización tras el despeje de las viejas construcciones.

Buteler precisó que la licitación para la edificación de las casas ya está lista, por lo que el llamado se podría concretar en el transcurso de las próximas semanas.

Espacio para 170 autos

El intendente adelantó que una vez que se retire el galpón que se comenzó a desguazar y se limpie toda el área, convocarán a una licitación para construir la playa de estacionamiento que prestará un servicio necesario para quienes concurren al CCC, ya que actualmente no queda lugar para dejar los vehículos sobre la Fernández Oro y las calles adyacentes.

La playa tendrá espacio para 170 rodados. Tendrá 36 luminarias y habrá guardia.

Conforme con el traslado

Don José Luis Fuentes tiene 74 años desde el 2002 que tiene su taller en el galpón que comenzó a ser demolido. De hecho había varios autos en su interior. El vecino aseguró que ocupó el lugar con el aval de las autoridades ferroviarias y admitió que sabía que se tenía que retirar.

Contó que tiene un terreno en la toma 2 de Febrero, ubicado en la zona del barrio Anai Mapu, y que allí instalará su emprendimiento mecánico para seguir trabajando. Para ello contará con la ayuda del municipio para desarmar la nave, que tiene una estructura de madera y chapa. Agregó que también le prometieron que le darán una de las casas que se proyectan construir para los ocupantes.

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"Está todo bien", subrayó respecto a la medida, y agregó que "hay buena onda" con los funcionarios del gobierno.

Contó que ha trabajado para diversas empresas y que incluso también hizo reparaciones de vehículos municipales.

También resaltó que el lugar no era seguro, ya que sufrió varios robos. Precisó que en una oportunidad le llevaron herramientas que tenían un valor millonario.

Desactivar aguantaderos

La actual gestión municipal ha puesto el acento en la eliminación de inmuebles que pongan en riesgo la seguridad pública. Con ese objetivo desactivó varias construcciones que habían sido tomados ilegalmente y donde se realizaban actividades delictivas. Los comúnmente denominados aguantaderos. Intervinieron en uno de la calle Perito Moreno 156, otro en el barrio Arévalo y un tercero de Ruta 22 y Pacheco, donde funcionó un vivero y estaba en situación de abandono.