Comedores y merenderos: más de un año sin recibir asistencia del Estado
Iniciado 2025, se plantean interrogantes sobre los efectos que la falta de actividad de comedores y merenderos ha tenido sobre la población carenciada.
A casi una semana de concluido 2024, la prácticamente total falta de ayuda del Estado, en todas sus instancias, a los comedores populares y merenderos ha abierto serios interrogantes sobre las condiciones de nutrición y salud general en que estarán muchos habitantes de la ciudad, tras más de un año sin recibir en forma continua raciones de comida que necesitaban.
A partir de noviembre de 2023, el Municipio suspendió las entregas de alimentos secos y frescos a los cerca de 75 comedores y merenderos que funcionaban por ese entonces. Esa vez, la cantidad de suministros fue bastante menor que la habitual y en meses anteriores, además, se habían registrado algunas demoras en el reparto que habían preocupado.
Te puede interesar...
Con la asunción de las actuales autoridades de la comuna en diciembre de ese mismo año, vino un cambio en la política de acción social, dejándose sin efecto el programa de suministro alimentario a las organizaciones sociales, barriales, iglesias, otras instituciones y vecinos independientes que cocinaban a diario para una población de varios miles de cipoleños.
A nivel oficial, se optó por una asistencia individualizada a personas y familias, pero en un número muchísimo más reducido y con entregas puntuales de bolsas con algunos productos solo cuando se cumplen determinados requisitos.
Mucho antes de que el Municipio interrumpiera su asistencia, Nación había cesado en sus muy acotados y puntuales envíos de alimentos y Provincia también se había ido desligando de esta asistencia hasta casi suspenderla. Así las cosas, el corte de su servicio por parte del Municipio terminó por demoler esta política pública.
Todo esto en el contexto de la decisión estratégica tomada por el actual gobierno nacional de prácticamente desvincularse de brindar ayuda a comedores y merenderos, lo que ni la Justicia ha podido hacer cambiar, puesto que el Ministerio de Capital Humano se viene negando a repartir los alimentos que todavía guarda en depósitos, pese a los fallos que lo obligan a realizar la entrega.
Transcurrido un año de la desarticulación de la asistencia a comedores y merenderos, el interrogante que se plantea es sobre el estado de salud en que se encuentra la gente que solía recibir porciones de comida preparada por las organizaciones e instituciones que se encargaban de su elaboración.
De acuerdo con el testimonio de dirigentes sociales, en la actualidad se observan más personas con un bajo peso notable, en particular, niños, mujeres y ancianos, que todavía buscan, con poca, alguna o ninguna suerte, en los lugares a los que concurrían, la alimentación que necesitan. La suerte que aún les queda es la que surge de los pocos comedores y merenderos que logran funcionar en algunos barrios, como en las vías de Ferri, en el Barrio Obrero A, en Puente de Madera y en Labraña.
En todos los casos, se trata del esfuerzo que los organizadores ponen para no cejar en su empeño solidario y de los aportes que los propios vecinos que todavía tienen capacidad para ayudar hacen. La continuidad de estos esfuerzos depende así de lo que puedan recabar, a veces con grandes dolores de cabeza.
hicos desnutridos o con muy bajo peso
La dirigente Lilia Calderón, referente del Barrio Obrero, manifestó que provoca mucho dolor y tristeza observar con frecuencia a gente buscando algo para comer en los canastos de basura que hay en las calles de la ciudad y dijo que le ha tocado "ver a chicos desnutridos o con muy bajo peso en relación con su edad”.
Al respecto, contó el caso de una madre con 5 hijos, a quienes les brindó asistencia hace algunos días. El estado de pobreza que presentaban era más que notorio y resultó que después se pudo comprobar que 2 de los niños, los más chicos, presentaban cuadros de desnutrición.
Expresó que en la ciudad hay más de 100 personas en estado de indigencia total y situación de calle, un número no tan lejano de alrededor de 90 que se habrían estimado en el Municipio hace un tiempo, según información disponible. Toda esta gente pasa hambre y privaciones indecibles, siendo unos cuantos de ellos habitantes de provincias del norte del país que vienen en busca de trabajo en el petróleo y no lo consiguen, y otros vienen a realizar tareas agrícolas.
El hecho es que incluso los que encuentran ocupación en las chacras suelen enfrentar días y días de hambre antes de cobrar algunos pesos. No son pocos los que acuden al comedor del Barrio Obrero para acceder a un plato de comida.
El año está empezando, por lo que ahora se plantea una nueva gran preocupación. Y se trata de lo que pasará en enero con la situación económica y social de tanta gente que transita la indigencia o la pobreza profunda. Ocurre que el primer mes del año suele volverse difícil para hallar empleo, ya que las vacaciones reducen las actividades económicas, excepto en la producción. Pero, en este caso, los trabajadores golondrinas saturan la plaza, en gran parte por anticipado, porque regresan temporada tras temporada a trabajar con patrones que ya conocen.
Además, Calderón indicó que el acotado número de personas que cobra el subsidio del Potenciar Trabajo seguirán cobrando unos 70.000 pesos y, lo peor, es que se anticipa un barajar y dar de nuevo en lo concerniente a la Asignación Universal por Hijo (AUH) y se teme que alcanzará a menos familias porque se volverán a pedir otra vez requisitos y se recortará la cantidad de beneficiarios.
Niños con problemas de salud, hombres esqueléticos
La referente Mónica Genen, titular del comedor Ubuntu, de las vías de Ferri, sostuvo que “hay un montón de gente pasando hambre” y que son muchas las parejas o madres solas con hijos que “no tienen nada para comer en la noche”.
Para complicar la salud de los indigentes y de quienes, en general, pasan hambre todo el tiempo o de manera esporádica pero no menos dramática cuando llega la ocasión, hace ya unas semanas el PAMI comenzó a limitar o directamente no entregar medicamentos a sus afiliados, con lo que a la falta de alimentación se ha unido la imposibilidad de conseguir remedios imprescindibles para muchos.
Los fármacos que no se están entregando o por los que hay que pagar más porque el PAMI no cubre su costo en su totalidad también se han convertido en un problema grande para gente que tiene ingresos pero que son muy escasos, bastante por debajo de la canasta de pobreza.
En el comedor también se cuenta con un botiquín comunitario, que también se abastece con donaciones, pero que no puede cubrir toda la gama de medicamentos que se recetan y menos en el momento. Se hacen esfuerzos, pero con las nuevas disposiciones de la obra social nacional todo se resulta ahora más difícil.
Falta de comida en los barrios
Por su parte, la dirigente Antonella Ramos, del Movimiento Evita Cipolletti, remarcó que "se sigue observando la falta de comida en los barrios. Se vienen registrando casos de desnutrición y de baja talla en niños, un montón".
Precisó que en el caso de su organización ha logrado sostener la actividad del merendero del barrio Puente de Madera, llamado Los Duendes, y del comedor del barrio Labraña, llamado Afortunados, a los que se considera espacios socio-comunitarios por la amplitud de actividades que desarrollan y que exceden lo alimentario.
"Se han sostenido con la ayuda de la gente y se vienen sumando más y más personas que buscan comer", resaltó y dijo que "nunca hemos tenido respuesta ni del gobierno municipal ni del provincial".
"Gracias a la solidaridad de nuestra comunidad, estos espacios han logrado sostener sus comedores, incluso mientras la cantidad de personas que necesitan ayuda crece mes a mes debido a la crisis económica", manifestó.
Y concluyó resaltando que "las políticas de ajuste, tanto del gobierno nacional como provincial, afectan directamente a las familias más vulnerables, poniendo en riesgo la alimentación de niños y niñas", por lo que "es momento de exigir soluciones reales y políticas que prioricen a quienes más lo necesitan".
Leé más
Confirman que el municipio suspende la asistencia a comedores
Noticias relacionadas
Dejá tu comentario