En el Municipio quieren ponerles chips a los perros
La medida apunta a un mayor control de la población canina.
La solución puede pasar por la instalación de chips subcutáneos de identificación en todos los perros de la ciudad. No habrá, por ahora al menos, rifle sanitario. Ni tampoco un impuesto por la tenencia de mascotas. La alternativa que se analiza en el Municipio para terminar de controlar la población canina pasa por las nuevas tecnologías y las posibilidades que abren para impedir que los dueños se desentiendan de las responsabilidades que se exigen por sus mascotas.
La sucesión de casos de agresiones de canes a personas ha causado inquietud en la sociedad y entre las autoridades de la comuna. Los hechos más recientes son el de un hombre atacado por una jauría en El 30 y el de una mujer a la que un grupo de perros sueltos mordió y tiró de su bicicleta. También está el sonado episodio protagonizado por un perro bravo que, entre sus andadas, suma cuatro personas mordidas. Su última acción lo llevó a ser encerrado en dependencias de la Comisaría 24. Algo totalmente insólito.
Te puede interesar...
A la abundancia de perros sueltos, se une la preocupante realidad de la guardería canina de la Isla Jordán, superpoblada con más de 550 animales. En el lugar ya no dan abasto y el Municipio tiene prohibido el ingreso de más ejemplares.
Ante este panorama, el responsable de Zoonosis, Juan Pedro Díaz, está evaluando introducir cambios en la ordenanza de tenencia responsable de mascotas, aprobada en 2016. El funcionario considera que en el texto existen "lagunas" que dificultan su cumplimiento. Se torna necesario, por eso, clarificar los aspectos que presentan dificultades, hacer más específicos otros e introducir algunos temas más.
Para Díaz, en esta etapa de sus análisis, uno de los asuntos a tener en cuenta en la modificación de la normativa pasa por incorporar un mecanismo de identificación por intermedio de chips o microchips, que ya se están usando de amplia manera en distintos lugares del mundo. El pequeño artefacto, no más grande que un grano de arroz, sería inyectado debajo del cuero del animal, cerca de la nuca o donde se determine. En él se pondría la información básica que permitiría dar de inmediato con su propietario, además de contar con otras referencias y todo de fácil lectura con aparatos informáticos.
El funcionario desechó, por el contrario, la posibilidad de aplicar un impuesto a quienes tienen mascotas, como ocurre en Europa, por estimarlo algo inviable para la sociedad argentina actual.
LEÉ MÁS
Leé más
Comienza a regir la prohibición del tránsito pesado por Circunvalación
Noticias relacionadas
Dejá tu comentario