A pesar de la derrota, Chiquito Romero aseguró que Boca tiene un juego "vistoso"

En una semana cargada de expectativas y tensiones, Boca Juniors se prepara para el enfrentamiento clave contra River en el Superclásico de la séptima fecha de la Copa de la Liga Profesional. La derrota ante Lanús, donde el equipo dirigido por Diego Martínez perdió 2-1, dejó un sabor amargo en la boca de los jugadores, especialmente del arquero Sergio 'Chiquito' Romero, quien hizo un análisis profundo sobre el encuentro.

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Chiquito Romero con la camiseta de Boca

"Nos engancharon en una, nos hicieron un gol y después se te hace un partido difícil. Así y todo, tuvimos nuestras chances, llegamos con nuestra forma de jugar, creamos muchas situaciones", reflexionó Romero, visiblemente afectado por la derrota. El arquero destacó las oportunidades perdidas en el primer tiempo y la importancia de concretarlas para cambiar el rumbo del partido.

Romero, exarquero del Manchester United, también elogió al arquero rival, Lucas Acosta, por sus intervenciones clave que evitaron que Boca igualara el marcador. "Tuvimos el cabezazo de (Lucas) Janson, el remate de (Luis) Advíncula y Edi (Cavani) después también tuvo su chance. Pero, en el análisis de la derrota, duele porque tuvimos muchas chances", expresó con pesar.

El análisis de Chiquito Romero sobre el juego “vistoso” de Boca

El arquero hizo un llamado a la superación y a cambiar el enfoque hacia el próximo desafío en el estadio Monumental. "Tenemos que salir a jugar por la camiseta, más allá del fútbol que nosotros tenemos, que es bastante vistoso. Ir al Monumental es llevar el alma de lo que es el hincha de Boca y llevar el fanatismo", señaló Romero, consciente de la importancia de recuperarse rápidamente.

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La semana previa al Superclásico se convierte así en un momento crítico para Boca Juniors, que busca redimirse y revertir la derrota ante Lanús. Romero subrayó la relevancia de los tres puntos en el fútbol actual y la necesidad de obtener resultados positivos, independientemente del control de posesión del balón. La presión está en aumento, pero el arquero y el equipo están decididos a dejar atrás el golpe sufrido y concentrarse en un rendimiento sólido contra su eterno rival.