Siguen robando medidores de agua en Cipolletti

Ya es alarmante el robo de medidores de agua en Cipolletti. El responsable local de ARSA, Luis Argüello, sostuvo que los ladrones se apoderan de entre 5 y 10 aparatos por día. Y no paran.

Los incita el valioso material de bronce con que están construidos y pueden vender en el mercado negro. Pero además se encuentran instalados en las veredas, en recintos que se muestran totalmente vulnerables.

El último miércoles un vecino del barrio Flamingo denunció que sustrajeron el de su casa y el de la vecina y se quejó porque no solo se quedó sin el servicio de agua y desconoce cuándo se lo reconectarán, sino que también deberá pagar para reponer el instrumento. Encima dice que la vereda se está inundando, porque el arrancarlos quedan las mangueras expuestas con el líquido escapando.

El incidente ocurrió en la calle Pastor Bowdler 606.

“Alrededor de las 14:30 volví de trabajar y me encontré con que robaron el medidor de agua de mi casa y la del vecino”, relató.

Agregó que hizo el reclamo a ARSA, pero que “no dan ninguna tranquilidad de que vayan a proporcionar una solución más o menos rápida, aunque sea provisoria”.

Además, sostuvo que la empresa estatal cobra para reemplazar el artefacto, pero opinó que deberían ellos hacerse cargo del costo “ya que les sirve para facturar el servicio y porque a pesar de la reiteración de los casos no ha tomado ninguna precaución para evitar los robos”.

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El vecino manifestó que la firma debería tomar algún tipo de medida para frenar este tipo de ataques, ya que los medidores “están a mano de cualquiera”.

Los hechos han generado inquietud en su sector barrial y algunos habitantes comenzaron montar medidas para protegerlos.

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Argüello expresó días atrás en una entrevista por LU19 que los robos causan una enorme pérdida de diferentes recursos, tanto como el agua propiamente dicha como así también dinero.

El funcionario aclaró que el costo por el cambió de medidor corre por parte de usuario, lo cual representa unos 20 mil pesos, que puede abonarse en cuotas.

Mientras que los delincuentes los pueden vender a poco más de 2 mil pesos como metal en una recicladora o chatarrería.

Sobre la modalidad, Argüello contó que en base a los videos que han visto de las cámaras de seguridad de los vecinos que han sufrido estos robos, los delincuentes sólo demoran 30 segundos en llevarse los medidores.