El concejal Martínez Larrea, en contra de ampliar el boliche

El concejal opositor Carlos Martínez Larrea manifestó que el Ejecutivo municipal tiene todos los elementos para pronunciarse sobre la propuesta de ampliación del boliche KPLA y, lo que es más, considera que tendría que hacerlo en contra de la alternativa.

El edil del bloque Pro-Juntos por el Cambio indicó que la normativa vigente de la comuna resulta suficiente para tomar una decisión, a lo que se deben sumar los argumentos vertidos por los vecinos disconformes con la iniciativa empresaria, quienes dialogaron recientemente con integrantes del Deliberante y ya lo habían hecho antes con el gobierno de Claudio Di Tella.

Expresó que el problema no se planteó en las últimas semanas, sino que las primeras notas que presentaron los vecinos en la comuna datan de noviembre del año pasado, siendo la última del pasado viernes 14.

Precisó que los residentes molestos con el intento de emprendimiento le han pedido al Legislativo local que se someta a discusión la zonificación de los boliches dispuesta en el Código de Planeamiento y que se exijan siempre todas las habilitaciones de las áreas técnicas pertinentes del Municipio.

También han solicitado que se dé intervención a la Dirección General de Desarrollo Territorial, la cual “debería ya estar interviniendo” porque “tiene la última palabra” y el tema tiene varios meses.

Además, han pedido revisar la normativa sobre ruidos molestos y los límites de decibeles y han requerido que los locales posean estructuras acústicas y de sonoridad que limiten los ruidos molestos. A la vez, han planteado la necesidad de estudios de impacto ambiental efectuados por entidades competentes, y horarios de apertura y cierre de los establecimientos.

Así las cosas, sostuvo que “con las normas que hay ya en el Código de Planeamiento, el Ejecutivo, que es el que tiene la última palabra a través de Desarrollo Territorial” tiene “suficientes facultades para determinar si es conveniente o no” la propuesta de KPLA. Y dijo que “si hay inconvenientes ya con el local existente sobre Roca, y este nuevo es de los mismos propietarios y están conectados los terrenos por el fondo, dentro de la misma manzana, eso es lo que hay que evaluar”.

“¿Tiene sentido instalar en la misma manzana una ampliación de un boliche existente que ya genera problemas?, esa es la cuestión”, independiente de otros planteos más técnicos que estén en juego, señaló, a modo de pregunta retórica, cuya contestación evidente es que “no tiene sentido”.

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A buscar otro emplazamiento

El concejal Martínez Larrea indicó que, si ya existen “trastornos” con el actual local bailable y se cuenta con normativa y antecedentes para evaluar la ampliación, “parecería que no es lo más prudente” habilitar y “habría que buscar otro lugar” para un nuevo emprendimiento. Por ello, su postura como edil es contraria a la propuesta empresaria. Pero, dependerá del Ejecutivo municipal la resolución final de la conflictiva situación.