Chocaron un casilla de churros y creen que fue por evitar a otro rodado que pasó en rojo
Una camioneta impactó contra la casilla de la churrería Camelo, que se encuentra sobre calle La Esmeralda. Por poco no fue una tragedia. Señalan a otro conductor que escapó.
Una Peugeot Partner chocó la casilla de la tradicional churrería Cameló, instalada en la esquina de La Esmeralda y Perú e investigan si fue por esquivar otra camioneta que cruzó el semáforo en rojo. El tradicional puesto de churros sufrió graves daños.
El incidente se produjo el miércoles alrededor de las 6:30 de la madrugada y el conductor del vehículo, que pertenece a una empresa de soldaduras, debió ser trasladado en ambulancia al hospital, dado que manifestó sentir dolores. El impacto contra la estructura del foodtruck fue muy fuerte, desplazó el tráiler y provocó roturas en el interior.
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“Tenemos que probar si funciona la freidora, que es el corazón de la fábrica”, lamentó Viviana, una de las responsables del emprendimiento junto a su hija y una hermana.
Pudo haber sido una tragedia, porque el impacto fue en la lanza que se engancha para trasladar la casilla, la que por poco no se encajó en el habitáculo por el lado del volante, sector que de todos modos resultó con severos daños.
Pero además el hecho afectó también el interior del remolque, que se encuentra completamente equipado para la fabricación de churros.
Según pudieron establecer, la Partner circulaba por La Esmeralda en dirección a Alem, y por causas que no habían podido establecer, se desvió hacia la izquierda y chocó el carro que se encuentra estacionado por esa misma calle a pocos metros de Perú.
El conductor iba a trabajar junto a un compañero que resultó ileso. Relató que tuvo que realizar una maniobra inesperada al cruzarse Perú en rojo desde oeste a este otra camioneta, cuyo conductor escapó. Creen que podría ser una F100 o similar.
“Nos despertaron para avisarnos que nos habían chocado la casilla y que hubo otro vehículo involucrado. Al menos no tenemos que lamentar algo peor. Una vecina nos contó que escuchó una explosión impresionante”, añadió la comerciante.
Creen que no fue más grave porque la casilla estaba montada sobre tacos, ya que le sacan las ruedas para evitar que se las roben, porque ya les sucedió. Por eso el golpe la desplazó hacia la vereda y la lanza no penetró en el rodado.
“Estaríamos hablando de otras cosa”, sostuvo sostuvo.
Trabajan para volver a funcionar
Cameló es un emprendimiento familiar que se inició hace poco más de una década. Lo arrancó Viviana con su esposo, ya fallecido, ante la necesidad de contar con un ingreso monetario. Primero estuvieron en las 432 Viviendas y luego de un tiempo en Arenales y Dante Alighieri para finalmente recalar el La Esmeralda y Perú, donde anteriormente hubo otros puestos de venta callejera con habilitación municipal.
Hoy la churrería es parada obligada para los cipoleños amantes de los churros y se convirtió en el sostén económico de las tres mujeres, por lo que la imposibilidad de funcionar les provoca un serio trastorno.
El impacto afectó la freidora eléctrica. Estaba llena de aceite, que se derramó en todo el interior. El artefacto es clave para la fabricación. Esperaban probarlo en las próximas horas, una vez que Edersa les reconecte el servicio, dado que fue interrumpido preventivamente a raíz del choque.
Pero también temen que hay sufrido roturas la amasadora, una heladera y otras herramientas. Además el desplazamiento hizo caer frascos de dulces y otros productos que quedaron destruidos en el piso.
Resaltaron que durante todo el miércoles estuvieron trabajando para poner en marcha nuevamente el equipamiento. Fundamentalmente tenía que evaluar las roturas y limpiar.
También subrayaron que previamente operarios de la firma propietaria de la camioneta que los chocó, las ayudaron para reubicar la casilla. Estaban ansiosas por saber cómo se encontraba el muchacho que manejaba, dado que había sido trasladado al hospital.
Una calle peligrosa
Efectivos de la Comisaría 24 concurrieron al lugar y ordenaron el resto del tránsito vehicular que a esa hora comenzaba a ser más intenso, dado que la Partner había quedado en un lugar que dificultaba la circulación. Los mismos operarios de la empresa a la que pertenece se la llevaron.
Destacaron que tuvieron que llamar al área de Tránsito municipal en dos oportunidades para que intervinieran y que no fue el personal del Gabinete de Criminalística a realizar pericias para que determinen cómo se produjo el incidente. De todos modos ellos se encargaron de tomar abundantes fotografías para el caso que se necesiten. También analizaban buscar imágenes de cámaras de seguridad que aporten más información.
Un dato que remarcaron, y que es una queja que se ha escuchado en otras oportunidades, apunta a lo peligroso que se torna el tránsito en la calle La Esmeralda en todo su trazado. No solo por lo intenso, sino también por la velocidad que levantan no pocos conductores.
Aún con semáforo, la esquina de Perú es escenario de choques. Los riesgos se incrementan en horas de la noche, cuando dejan de funcionar.
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