Arranca el juicio por la muerte de Sagredo en la Cuarta

Tres policías se sentarán hoy en el banquillo de los acusados por la muerte de un detenido dentro de un calabozo de la Comisaría Cuarta. En abril de 2016, Santiago Sagredo fue detenido por manejar alcoholizado y encerrado en la unidad policial céntrica. Allí, sufrió una hemorragia masiva que le causó la muerte. Su familia acusó a los encargados de la guardia, bajo la sospecha de que lo golpearon, y los uniformados llegaron a juicio por homicidio culposo e incumplimiento de los deberes de funcionario público.

Para el proceso oral se programaron cuatro audiencias, desde hoy hasta el lunes, en la sala 1 del juzgado ubicado en Urquiza y España.

La Justicia citó a testigos y peritos para intentar dilucidar qué pasó en la celda de Sagredo y la posible responsabilidad de los tres imputados: Leandro Pastene, Cristian Correa y Daniel Ferreyra.

Pastene, cuartelero, y Correa, oficial de guardia, están acusados de homicidio culposo e incumplimiento de los deberes de funcionario público. A Ferreyra, quien era oficial de servicio, se le suma la acusación por adulteración de documentos públicos porque habría modificado el libro de guardia para que no quedara el registro de la detención, en un presunto intento por encubrir el hecho.

Ferreyra ya no forma parte de la Policía. Después del caso Sagredo estuvo prófugo y fue exonerado de la fuerza por una condena de coacción en Villa Regina.

Los tres acusados, en caso de recibir la pena máxima, podrían pasar hasta cinco años privados de su libertad.

En torno al caso hay algunas certezas, pero todo se vuelve misterioso a partir del ingreso de Sagredo a la comisaría. El hombre fue detenido el 15 de abril de 2016 a la madrugada por conducir en forma imprudente en el centro de la ciudad. Tanto la fiscalía, representada por Martín Pezzetta, como la querella, encabezada por Oscar Pandolfi, reconocieron que Sagredo estaba alcoholizado. A partir de esa situación, fue trasladado a la comisaría. Según el abogado de la familia, sin que se cumplieran los pasos legales correspondiente.

La fiscalía también cuestionó que Santiago Sagredo fuese enviado al calabozo sin pasar por el médico. Y acusó a los policías por esa acción y por la falta de custodia del detenido, que impidió asistirlo cuando sufrió la hemorragia. La familia del joven, en tanto, denunció que su cuerpo presentaba numerosas marcas de golpes, por lo que no se descarta que en el juicio acusen a los uniformados de haberlo golpeado.

“Necesitamos saber qué pasó”

La familia de Santiago Sagredo denunció a los policías inmediatamente. Mientras desde la fuerza afirmaban que no había responsabilidad alguna, la viuda de Sagredo, Claudia Olave, llevó el caso a la Justicia. Antes del juicio, se mostró optimista en lograr que los acusados vayan a prisión. “Están dadas las condiciones para que los policías sean condenados. Tenemos todas las pruebas necesarias, y las pericias indican que Santiago tenía 16 lesiones que nadie supo explicar: ocho internas y ocho externas. Además, una de ellas fue en el corazón. Si fue una muerte natural, como intentaron instalar, cómo explican la gran cantidad de lesiones o la adulteración del registro de guardia”, cuestionó Olave.

“Hace cuatro años espero este momento, sus dos hijos y yo queremos estar en paz y necesitamos saber qué pasó”, concluyó.

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