Siguen sin precio las tierras de las tomas cipoleñas

Para los habitantes de las tomas incluidas en el proceso de expropiación del Municipio, cada vez resulta más urgente que se avance en la determinación del precio de sus lotes, para empezar a pagarlos cuanto antes y que se inicie así la urbanización y la regularización de los servicios básicos.

Funcionarios de la comuna han mantenido contacto hasta ahora con vecinos de cuatro de los cinco asentamientos que participan de la iniciativa expropiatoria. Se trata de los barrios Obrero A y B y las tomas 2 y 10 de Febrero. Todavía está pendiente una recorrida por el sector de Nueva Esperanza.

En sus visitas, los representantes municipales han informado sobre los pasos legales y administrativos que se están dando para terminar de identificar a propietarios y herederos de las tierras. Sin embargo, hasta ahora no ha habido ninguna mención al valor que deberán pagar los pobladores para adquirir sus predios.

Ayer, Lilia Calderón, referente del Foro por la Tierra y la Vivienda, manifestó que a esta altura debería ya conocerse cuánto tendrá que abonar cada vecino y la forma en que podrá hacerlo. Desde ya, descartó la posibilidad de que se concrete el pago al contado o en pocas cuotas, debido a las dificultades económicas y sociales que se viven en los asentamientos.

La dirigente agradeció el trabajo de informar a los vecinos que ha asumido el Municipio y la voluntad para despejar incógnitas en torno a la propiedad. Pero recordó que la comuna ya dispone del valor fiscal de las tierras y sabe que puede agregar un 30 por ciento más por ley. Los pobladores no objetan incluso que la comuna añada un monto pequeño por su actuación. Sin embargo, persiste la incógnita sobre el precio y las condiciones.

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