Expulsan del país a un paraguayo que intentó matar a una mujer

El titular del Juzgado de Ejecución Penal 8 de Cipolletti, Lucas Lizzi, ordenó la expulsión a Paraguay de Esmeraldo Florentín Bedoya, oriundo de ese país, quien cumple una condena de seis años de prisión por una brutal agresión a una mujer.

El hombre agota la pena en marzo de 2026 y tramitó a través de su abogado defensor su salida del territorio nacional -técnicamente denominada “extrañamiento”, con el aval de la Fiscalía y sin objeciones por parte de la víctima y su pareja, también damnificado.

La medida deberá ser cumplimentada por la Dirección Nacional de Migraciones, desde donde ya se comunicó que Bedoya permanecía en la Argentina de manera irregular, por lo que además le dictaron la prohibición de ingreso con carácter “permanente”.

El caso que lo llevó tras las rejas ocurrió del 1 de marzo de 2020 en una vivienda de la toma Los Paraguayos, cercana al barrio Costa Norte, donde se desarrollaba una fiesta.

En horas de la madrugada la mujer salió a comprar a un comercio vecino junto a otras dos personas y se encontró con Bedoya y su hermano Severiano, quien quiso seducirla, pero ella lo rechazó.

Minutos después la chica fue a un baño exterior, donde la sorprendió Severiano, quien la tomó de atrás e intentó bajarle los pantalones con el propósito de violarla.

Pero la joven pidió auxilio desesperadamente y sus gritos fueron oídos por su pareja, quien fue en su ayuda y evitó que consumara el ataque sexual. De todos modos irrumpió Esmeraldo, quien lo tomó del cuello con un machete y le advirtió “te voy a cortar el cuello”, aunque logró zafarse.

Sin embargo no terminó ahí el terror para la pareja, porque se fueron a la casa de él, en Costa Norte, y volvieron a aparecer los agresores que abrieron la puerta a patadas y mientras Esmeraldo golpeaba salvajemente a la mujer en la cabeza con el machete, Severiano tiró a la pareja a un pozo ciego, donde le arrojó piedras para que no pudiera salir, sufriendo lesiones en todo el cuerpo.

En un momento la mujer aprovechó un descuido y salió corriendo por la calle, con Esmeraldo detrás. Buscó refugio en una casa vecina, pero al embestir un cerco cayó al piso, donde el agresor le dio patadas en todo el cuerpo.

Entonces salió el dueño de casa, lo que motivó que los hermanos frenaran el ataque, aunque los intrusos les advirtieron que “eso no iba a quedar así”.

Ambos hombres fueron detenidos por la Policía. Esmeraldo fue imputado por el delito de intento de homicidio, amenaza calificada por el uso de arma y lesiones leves, en tanto que su hermano recibió los mismos cargos, con el agravante del intento de violación, aunque finalmente recibió una menor pena.

Insólito: acusaron a la víctima

En el juicio realizado en noviembre de 2020 ambos fueron condenados. Esmeraldo a seis años de cárcel, y Severiano a cinco.

En el desarrollo del proceso sucedió algo insólito: la defensa de Esmeraldo pretendió incorporar a la causa que la víctima lo habría lesionado con un arma de fuego. Pero fue desestimado.

“Si los hermanos Florentín sufrieron algún hecho delictivo o alguna agresión por parte de (la mujer) y su pareja como dijeron, no debieron concurrir del modo en que lo hicieron a esa casa. La explicación es que fueron a ajusticiarlos por mano propia, fueron y actuaron como los dueños del barrio, esto es lo que evidenciaron y las consecuencias quedaron plasmadas en el juicio”, expresó el fallo.

Trámite de "extrañamiento"

La resolución del juez Lizzi autoriza a la Dirección de Migraciones la expulsión de Esmeraldo Florentín Bedoya, una vez cumplidos los recaudos reglamentarios y legales de su competencia. Para ello debía coordinar la salida el Servicio Penitenciario rionegrino. Hasta tanto se cumpliera la medida Bedoya debía permanecer tras las rejas.

En cuanto a la situación judicial de su hermano Severiano, no aparece en este expediente.