Confesó que violó y abusó de sus sobrinas menores y va 9 años y medio a la cárcel
El hombre, que había escapado a Chile, estaba a cargo de las víctimas por la muerte de su madre, su propia hermana. En el juicio abreviado surgió que había una tercera víctima.
Las dos niñas fueron abusadas y violadas por el tío. Ocurrió el Cinco Saltos y depravado confesó. Lo condenaron a 9 años y 6 meses de prisión.
Dos hermanitas menores de edad que habían quedado al cuidado de su tío por el fallecimiento de su madre fueron agredidas sexualmente durante casi tres años por el familiar, en el domicilio que compartían en un barrio de Cinco Saltos.
Fue una tía de las niñas, hermana de la madre y también del depravado, quien hizo la denuncia y permitió ponerle fin al calvario que se extendió durante cerca de tres años, y que como consecuencia debieron requerir asistencia psicológica.
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El hombre, identificado con las siglas RERG, se había escapado a Chile, donde finalmente fue atrapado y extraditado a la Argentina, donde quedó preso. La identidad del abusador se mantiene bajo reserva para proteger a las víctimas del abuso sexual.
En los tribunales de Cipolletti fue sometido al proceso judicial que concluyó con la condena a 9 años y 6 meses de prisión en un juicio abreviado en el que el hombre admitió su culpa.
Un monstruo en el hogar
La causa se dividió en dos hechos. El primero ocurrido entre septiembre de 2019 y enero de 2022 y la víctima fue una chica que entonces tenía 15 años de edad. En un número “indeterminado de veces” RERG violó a la adolescente tanto en una habitación del inmueble como también en un Fiat Uno.
La acusación describe actos espantosos, que revelan un grado de depravación repugnante. El tío la obligaba a que le practicara sexo oral. Mientras que el 25 de diciembre de 2021, día de Navidad, alrededor de las 4 de la madrugada, la despertó y la llevó a un dormitorio, donde la tomó de los brazos y la accedió vía vaginal y anal.
En el otro hecho la damnificada fue una criatura de 9 años, hermana de la anterior. Entre junio de 2019 y diciembre de 2020 abusó de ella en forma “gravemente ultrajante” también en un número “indeterminado de veces”. Fue en distintos ambientes de la casa, donde la obligaba a tocarle su miembro viril y él la manoseaba por debajo de la ropa.
Un día una de las chicas le contó a su tía lo que estaban padeciendo, y la mujer presentó la denuncia policial que dio lugar a que se activara el protocolo de abuso y diera inicio la investigación penal.
RERG fue imputado por “abuso sexual con acceso carnal (hechos reiterados), doblemente agravado por ser cometido en contra de una menor de 18 años aprovechando la situación de convivencia preexistente y por ser cometido por una persona encargado de la guarda” por el primer caso.
Mientras que por el segundo le enrostraron el delito de “abuso sexual gravemente ultrajante doblemente agravado por ser cometido en contra de un menor de edad aprovechando la situación de convivencia y por ser cometido por una persona a cargo de su guarda”.
La fiscalía expuso pruebas contundentes contra el acusado, a lo que se sumaba su propia confesión.
Propuesta de juicio abreviado
En una audiencia realizada a principios de este mes RERG, junto con su defensor Oficial Mario Sebastián Nolivo, el fiscal Leandro López y la defensora de Menores Alicia Merino en representación de la menor víctima, propusieron cerrar la causa en un juicio abreviado e imponerle una condena de 9 años y 6 meses de prisión, más las costas del proceso.
Esa audiencia fue por zoom, debido a que el acusado se encontraba detenido.
Merino aclaró que brindaba asistencia a la menor, porque la otra chica había alcanzado la mayoría de edad.
Desde la Fiscalía destacaron que se habían entrevistado con ellas y con una referente adulta, y que prestaron conformidad con el acuerdo alcanzado.
Las pruebas de la Justicia
El tribunal compuesto por Guillermo Merlo, Julio Sueldo y Alejandra Berenguer, a aprobar por unanimidad el acuerdo presentado por el defensor Oficial Mario Nolivo y el fiscal Leandro López.
Consideraron que “la evidencia enunciada, básicamente las declaraciones de las víctimas y el sustento de las mismas en los distintos testimonios de familiares y allegados, nos llevan a considerar acreditada la existencia histórica de los hechos traídos a juicio”.
Además de sus propios testimonios, también lo brindó una amiga que conocía el entorno familiar y había advertido algo. También declaró una hermana mayor, quien también fuera víctima de abusos sexuales por parte del acusado, y le habría contado a su madre lo sucedido pero no le creyó.
Los jueces también mencionaron como sustento los aportes de docentes y profesionales médicos, del área de Salud Mental del hospital de Cinco Saltos y de la Oficina Atención de la Víctima, quienes les brindaron asistencia tras conocerse los ataques, además de policía y peritos que trabajaron en la causa.
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