Viejos son los trapos: ni la pleamar frenó a una antigua F100 en Las Grutas

La secuencia podría ser utilizada acertadamente para una publicidad de esas que evocan clásicos de otra época. Porque impacta, tanto por lo inesperado como por lo paradójico.

Esto sucedió el miércoles en un sector de las deslumbrantes playas del sur de Las Grutas.

Y si no fuera porque alguien lo filmó, quizá más de uno le quitaría credibilidad al relato.

camioneta en playa de Las Grutas

Sale sin novedad la clásica camioneta.

Todo arrancó el miércoles, cuando un grupo de amigos del balneario fue al rescate la Toyota Hilux de un turista de Buenos Aires que había quedado severamente empantanada en un cangrejal a unos diez kilómetros.

Habían intentado sacarla con otra camioneta, pero fue imposible porque estaba encajada hasta los ejes, por lo que se organizaron para el otro día insistir con equipamiento reforzado.

camioneta en playa de Las Grutas

La Ford avanza entre las rocas que desprende el acantilado. Su conductor conoce por donde ir.

Partieron poco después del mediodía, con la marea en ascenso, en un convoy compuesto por camionetas doble tracción, cuatriciclos y motos. Eran cerca de 20 voluntarios en total.

Pero al llegar al sector conocido como El Sótano se vieron obligados a parar la marcha, pues allí se termina el camino y hay que transitar por un extenso tramo de costa.

El comportamiento del mar es un condicionante para circular, pues en pleamar suele llegar hasta el acantilado e impide seguir. Justo lo que pasaba en ese momento.

Así que bajaron de los vehículos y se entregaron a una amena charla, cuando vieron aparecer repentinamente al pie del barranco una camioneta entre las olas.

“Quedamos todos con la boca abierta. Nos quedamos mirando como pasaba”, relató uno de los participantes de la travesía.

Afortunadamente “Chiche”, otro de los rescatistas, tomó su teléfono y alcanzó a filmar la maniobra.

camioneta en playa de Las Grutas

Cargada de leña y pulpos, vuelva hacia Las Grutas.

En las imágenes, que se viralizaron en las redes sociales, se observa que es una antigua Ford F100 (modelo 80 aproximadamente) que cargada de leña avanza entre el oleaje y esquivando los trozos de roca que desprende el acantilado, lo que puso en evidencia que quien lleva el volante además de tener pericia, conoce el terreno.

El hábil conductor sería, según distintos testimonios, un pulpero artesanal de la zona que, efectivamente, sabe a la perfección por donde se tiene que pasar para no quedar atrapado por el mar, y que el mismo recorrido lo hace habitualmente.

camioneta en playa de Las Grutas

La Toyota atascada que movilizó al grupo de amigos para rescatarla.

Quedaron tan sorprendidos los amigos rescatistas que cuando pasó cerca de ellos solo atinaron a aplaudirlo.

En cuanto a la misión que llevaba, la pudieron cumplir luego que bajamar les permitió seguir circulando.

“Nos costó, pero la pudimos sacar”, contaron en alusión a la Toyota atascada en la arena.