La búsqueda de la nena de Las Perlas se trasladó a Guerrico y Cervantes
Se cumplió una semana de la desaparición de la nena de 10 años en Balsa Las Perlas. Los rastrillajes siguen río abajo.
Sigue la búsqueda de Jésica, la nena de 10 años de edad que el martes pasado desapareció en las aguas del río Limay, en Balsa Las Perlas.
Las esperanzas de encontrarla con vida son mínimas, por eso los rastrillajes continuaron río abajo, dado que presumen que la fuerte correntada pudo haber trasladado el cuerpo.
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Trabajan efectivos policiales con perros adiestrados, Bomberos Voluntarios, buzos especializados, personal de Prefectura Naval, de la dirección de Protección Civil de Cipolletti y colaboradores.
Rastrillajes río abajo
El operativo llegó a la confluencia con el río Neuquén donde nace el río Negro y siguieron por la Isla Jordán, el balneario de Cipolletti, pero los resultados fueron negativos.
El fin de semana se concentraron en inmediaciones de Allen, donde un testigo dijo haber visto un cuerpo flotando. Pero pese a los esfuerzos y tras varias hora de labor no encontraron a la chiquita. Son áreas costeras que en muchos lugares el acceso es difícil, con abundante vegetación en el cauce.
En las últimas horas la búsqueda se desplazó hacia la zona de Coronel Guerrico y Cervantes, informó el comisario Inspector Nelson Monsalves, segundo jefe de la Unidad Regional V. Explicó en una entrevista por LU19 que se van movilizando en base a los testimonios que van recibiendo.
La desaparición de la nena en Las Perlas
El martes 7, cerca de las 19:45, personal policial del destacamento de Balsa Las Perlas fue alertado por la familia Antelo acerca de lo sucedido en inmediaciones del puente que une Neuquén y Río Negro.
Jesica de 10 años de edad se había arrojado al río Limay para intentar rescatar a su hermano mayor que era arrastrado por la corriente. A los pocos minutos del hecho, el hermano logró salir, pero la niña no. "Él la quiso sacar del agua, pero no pudo", contó la mamá de los niños a la Policía.
Pescador continúa desaparecido
El último lunes un joven de 24 años que pescaba en el dique Ballester cayó al agua y fue arrastrado por el río Neuquén. El muchacho, oriundo de Fernández Oro, había visitado el lugar con sus amigos, su pareja y sus dos hijos.
"Estaba pescando en la compuerta número 8, que está abierta, y la corriente lo chupó y en menos de 15 minutos lo perdieron de vista", aseguraron sobre el trágico episodio.
En el lugar trabajaron los Bomberos Voluntarios de Centenario y efectivos de la Comisaría 49 de Vista Alegre, de la Policía de Neuquén.
Según informó el portal de noticias local, Centenario Digital, las personas que lo acompañaban vieron que el joven no pudo salir por sus propios medios del agua y dieron aviso a la Policía. El operativo se inició pasado el mediodía en la costa del lado rionegrino, y a los minutos se sumaron agentes de tránsito, municipales y efectivos de la Comisaría 49 de Vista Alegre.
"Al arribo de los Bomberos de Centenario con una embarcación y buzos tácticos, la búsqueda se centró en las compuertas 8 y 9 del Dique, ya que en ese sector, el cuerpo del joven fue visto por ultima vez. Las autoridades del Dique autorizaron una maniobra de derivación del agua por las compuertas 1 y 2 para reducir el caudal y la correntada del agua en el lugar de la búsqueda", publicó el medio de la localidad.
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