Estaba borracha y escuchaba música a todo volumen a las 3 de la madrugada

La música a todo volumen suele generar desencuentros entre vecinos. Sobre todo si se escucha en horas de madrugada y en la previa de un día laboral.

Eso fue lo que sucedió en Valcheta, la localidad ubicada en la Línea Sur, a poco más de 100 kilómetros de Las Grutas.

El lunes 20 del mes pasado a las 3:17 un inspector municipal se comunicó con la Comisaría 15 y pidió presencia policial porque en una vivienda cercana a su domicilio se advertía “música alta”.

De inmediato fue hasta el lugar una patrulla con dos policías, quienes efectivamente, constataron que en el inmueble señalado el sonido de la música era elevado. Los uniformados afirmaron que golpearon la puerta varias veces, pero no salió nadie. Aunque notaron que bajaron el volumen. Y se fueron.

Comisaría 15 de Valcheta

Sin embargo pocos minutos después -a las 4:07- llamó una mujer a la dependencia y además de decir en forma anónima que vivía en la calle San Martín, aseguró que era ella la responsable de la música desaforada y que no pensaba bajarla. También admitió que estaba consumiendo bebidas alcohólicas.

El policía que la atendió dijo que el mensaje lo repitió en más de una oportunidad y que “se nota en su habla estar bajo los efectos del alcohol”.

De todos modos le pidió “que tenga la cordialidad” de bajar el sonido para evitar inconvenientes con sus vecinos, pero ignoró el requerimiento.

"No voy a bajar la música"

Ante la reticencia de la mujer, el Oficial de guardia ordenó al personal de calle visitar nuevamente la misma casa. Eran ya las 4:40 y la música seguía al mismo nivel.

En esa oportunidad los atendió pero no de buenas maneras.

“Yo no voy a bajar la música porque estoy en mi casa y en mi terreno y me hago responsable de lo que pase …", dicen que les respondió LVA, como la identifican los documentos judiciales.

Entonces, como mantenía su postura rígida, los agentes se retiraron.

Severo llamado de atención

La disputa generó una causa contravencional que tuvo continuidad en el Juzgado de Paz de Valcheta, en la que acusaron a la díscola de haber transgredido el artículo 49 del Código Contravencional, referido a la “Perturbación a la convivencia armónica”.

Esa norma dice que “es punible quien con ruidos de cualquier especie, aparatos eléctricos, o abusando de instrumentos sonoros, o que no impida el estrépito de animales, o ejerciere un oficio ruidoso, de modo y en lugar contrario a los reglamentos y ordenanzas municipales, perturbando de manera continua el reposo de las personas”.

Por tal motivo LVA fue condenada con un “severo llamado de atención” y le impuso una “Amonestación”, que consiste en la “exhortación formulada al contraventor, con miras a evitar futuras infracciones y para hacerle notar la gravedad de su falta, la turbación que ella importa para la coexistencia pacífica de la comunidad y las consecuencias negativas para sí, su entorno afectivo, su familia y la sociedad en general”.

Entrada Valcheta.jpg

Además, para “evitar repetición de los hechos como los denunciados”, le ordenaron “abstenerse de protagonizar e interrumpir el reposo y la tranquilidad de las personas, como así actos molestos, producir incidentes/provocaciones, proferir agravios -directa o indirectamente”.

Le advirtieron que ante una eventual reincidencia, “es admisible la comisión culposa de la falta”.

En tanto que deberá reencausar la denuncia “en los términos de la vía y forma que corresponda” con patrocinio letrado o asistida con un defensor oficial . Asimismo, le sugirieron “tomar recaudos que estime necesarios para resguardar su integridad psicofísica”.