"La revancha va a ser una fiesta, nosotros somos distintos"
Del Prete se refirió a lo sucedido en el Maiolino, donde fue agredido.
Del Prete completó los 90 minutos del clásico ante el Deportivo Roca.
"Estoy bien, con un poco de dolor de cabeza y esperando la opinión de los médicos para ver cómo siguen mis días", expresó en un alto del lunes libre.
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Antes, en una de las notas que brindó el delantero local a LU5 confesó estar acostumbrado a este tipo de situaciones. "Lamentablemente, siempre que vamos a esa cancha nos tiran piedras. El presidente debería estar preocupado por sacar la gente de la zona donde se ingresa a los vestuarios", soltó.
Al tanto de los dichos de Jorge Escaris, confirmó que el directivo no se comunicó para preguntar cuál era su estado. "Coco (por Diego Landeiro, DT de Roca) sí me llamó y estuvimos hablando bien temprano", se sinceró.
Dramático
El mal momento también se trasladó a las tribunas del Luis Maiolino, donde el papá de Del Prete observaba todas las acciones junto a la mamá del jugador.
"Mis hermanos quedaron en casa, mis padres fueron. Cuando pasó todo, mi viejo se metió a la cancha para ver cómo estaba. La verdad que una vergüenza", sostuvo.
A dos fechas de cerrarse la segunda ronda, el particular sistema de disputa tiene tres turnos de partidos en el mismo grupo previstos. Por eso, Roca deberá visitar La Visera para el 12º acto de la fase regular. Y proyectando lo que puede ser el clima para ese nuevo choque provincial, el juvenil atacante cipoleño confió en un buen comportamiento de los hinchas albinegros al asegurar: "Nosotros somos muy distintos a ellos en muchos aspectos. La revancha en La Visera va a ser una fiesta y el hincha tiene que estar tranquilo".
Escaris se rectificó por sus dichos posclásico
El presidente del Deportivo Roca, Jorge Escaris, pidió disculpas en diferentes medios por sus dichos posteriores a la violencia que se vivió en el clásico entre su institución y Cipolletti por el Federal A.
Después de haber expresado que los futbolistas visitantes hacían teatro cuando se retiraban a los vestuarios, el comerciante se arrepintió.
"En su momento no vi los incidentes. Las personas que tiraron las piedras no son hinchas del club. No tiene explicación", sostuvo.
Subiendo el tono de las declaraciones, y con los diarios del lunes sobre la mesa, Escaris sentenció: "Son unos cagones que se escudan en la multitud".
Tras confirmar que fue quien pidió a la Policía que sacara a los hinchas de Cipolletti del Luis Maiolino sin respuesta de los uniformados, también se mostró arrepentido por haber insinuado que la presencia del público albinegro hubiera sido fogoneada, como sí lo aseguró el domingo, en los minutos posteriores al 0 a 0. "No creo que los dirigentes de Cipolletti hayan orquestado lo que pasó", amplió.
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