Se agrava la salud del abuelo atacado por delincuentes

Con el paso de las horas se agrava la salud de Antonio, el abuelo de 97 años que fue salvajemente atacado por tres delincuentes en su casa del barrio Islas Malvinas el último viernes para despojarlo de su jubilación.

“Su salud se complicó. Tiene una hemorragia muy grande en su cabeza y no pueden operarlo por su avanzada edad. La hemorragia le está tomando el sistema neurológico, así que lo van a mantener con medicación. No se puede hacer más nada”, contó Romina, una de sus nietas.

Por su parte, la fiscal Soledad Rangone informó que, a dos de los delincuentes, se les formuló cargos el mismo día del hecho y se les impusieron medidas de restricción.

El abuelo, todavía consciente después del violento robo, identificó a dos de los tres delincuentes, ya que los conocía del barrio porque paraban en la misma esquina en la que él vive. Así fue que lograron detenerlos a las pocas cuadras del lugar del hecho, pero la Fiscalía de Robos y Hurtos los acusó por el delito de robo simple y tras la audiencia quedaron en libertad supeditada a la causa.

Hasta el momento, no se contaba con la información completa respecto a las graves lesiones que había sufrido el abuelo y de su grave estado de salud, lo que podría cambiar la carátula de la causa e incluso la fiscalía que lleve a cabo la investigación en el caso de que el abuelo Antonio fallezca.

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El estado de salud del abuelo Antonio se agrava con el paso de las horas.

La feroz paliza que recibió el anciano, tuvo lugar en su propia casa, ubicada en la esquina de Batilana y Antártida Argentina. Los delincuentes, que son del barrio, esperaron que se retirara de la casa una nieta que vive con Antonio. Luego sí, forzaron el portón e ingresaron raudamente al inmueble.

El abuelo, que tiene problemas de sordera, no escuchó nada hasta que los delincuentes lo sorprendieron sentado en la mesa, comiendo. Eran entre las 17:30 y las 18 del día viernes.

Comenzaron a golpearlo con saña, mientras le exigían que les entregara el dinero que acababa de cobrar de su jubilación.

Finalmente, los ladrones se llevaron 8 mil pesos, un pequeño parlante portátil y la mochila de su bisnieto.

Romina contó que, producto de la golpiza, a su abuelo le fracturaron la mandíbula y la nariz, le provocaron varios hematomas en la cabeza y uno de sus ojos quedó muy comprometido a raíz de una seria lesión.

María, la nieta que vive con él, lo encontró al volver a su casa, tendido en el piso, sobre un gran charco de sangre y con su cara completamente desfigurada.

Con lo poco que le quedaba de energía, el abuelo alcanzó a decir quiénes eran dos de los delincuentes. Luego, una ambulancia lo trasladó de urgencia al hospital Castro Rendón, donde permanece internado, en grave estado de salud.

“Mi abuelo ya no puede comer solo, mientras los chorros que le hicieron esto ya están libres por la calle. Siento una impotencia… Estamos muy tristes, pero moviéndonos para que no quede en la nada”, señaló Romina.