Paseaba al perro y encontró una granada de guerra que se usaba en la guerra de Malvinas

Un paseo cotidiano del perro puede transformarse en una aventura insólita por distintos motivos. Pero en este caso una vecina del barrio Islas Malvinas recorría el barrio junto a su amigo de cuatro patas cuando se topó con un objeto que llamó la atención: una granada de mano construida por Fabricaciones Militares.

El hallazgo se produjo el domingo a las tres de la tarde en la intersección de las calles Catriel y Matheu. "En la esquina había un poco de basura, que lamentablemente suelen tirar los vecinos, allí la observó y avisó a la Policía", informó Rubén Rodríguez, jefe de la Comisaría Tercera, perteneciente a la jurisdicción.

Inmediatamente, tras el llamado telefónico, el propio Oficial Inspector Martínez se hizo presente en el lugar y ordenó realizar un perímetro preventivo. Había que guardar precaución porque el artefacto militar podría estar activo.

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¿Cómo llegó la granada a la calle?

Consultada por las hipótesis sobre cómo y por qué había una granada en la vía pública, Rodríguez atinó a decir: "Es una esquina de barrio, no hay hipótesis, puede ser algún vecino que arrojó ese elemento". Sin embargo, confirmó que la investigación se inició de oficio y quedó a cargo de la fiscal Paula González.

Al respecto de las primeras averiguaciones, el comisario informó que aún no tienen indicios, pero se encuentran trabajando en el relevamiento de las cámaras que hay en las inmediaciones para determinar las circunstancias y saber cómo llegó hasta ahí un objeto militar.

Cabe destacar que el barrio no corrió peligro porque la granada no funcionaba, dato que se corroboró gracias al trabajo del comisario Juan Molina, técnico especializado en desactivación de aparatos explosivos de la Policía de Neuquén, quien procedió al secuestro de la granada ubicada contra el muro lleno de grafitis cercano a un barrio de monoblocks.

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"El perito de explosivos determinó que la misma tenía seguro puesto, y carecía de tren de fuego, el sistema de detonación de la misma, elemento esencial para que se active y cause el efecto destructivo", indicó el Jefe de la Comisaría Tercera. De acuerdo al protocolo, lo trasladaron hasta la División Bomberos de la Policía de Neuquén, donde lo examinarían y luego lo pondrían en un polvorín para destruirlo.

La historia de las granadas de mano

La granada de mano de guerra encontrada es modelo FMK - 2 de Fabricaciones Militares, construida en Fray Luis Beltrán (Santa Fe) con el concepto moderno de doble propósito: ofensiva para un avance al descubierto y el lanzamiento de la granada y defensiva, sin tener que adicionar ningún aditamento extra para que se fragmente cuando el soldado está a cubierto.

Además, siguiendo el modelo español, buscaba mayor perfección técnica para garantizar seguridad y evitar cualquier tipo de accidente. En este sentido, el sistema de funcionamiento clásico fue reemplazado por una anilla de seguridad con dos pasadores, uno de tipo convencional chaveta y otro pasador liso, más fácil de colocar en caso de abortar el lanzamiento. Además, un seguro adicional llamado de transporte, que es un alambre de acero que rodea la unión del cuerpo con la parte superior, se interpone bloqueando la palanca. Entonces, si se saca la anilla por accidente, este seguro retiene la palanca.

En cuanto al uso que tuvo la granada hallada casualmente, cabe destacar su implementación en la Guerra de Malvinas, donde el Estado argentino buscaba recuperar el territorio ocupado por Gran Bretaña.

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Sargento Mario Antonio "Perro" Cisneros y un compeñero portando en sus espalderas granadas de mano para la guerra en Malvinas.

Empacadas en un cajón de madera de pino que tenía capacidad para unas 20 granadas, el cuerpo de fundición de hierro, con la parte superior de aluminio, piezas menores, palanca, resortes y pasador de seguridad de acero, además de un retén del tren de fuego en reposo de latón tenían el tamaño y peso ideal para el lanzamiento a una distancia entre los 30 y 50 metros sin que el usuario posea intensa preparación previa.

Si bien algunas granadas que quedaron totalmente inertes, es decir, sin tren de fuego, forman parte de colecciones privadas, es un misterio cómo una llegó a quedar tirada en una esquina del barrio Islas Malvinas de Neuquén.