“El enano estaba sobre un tupper con cemento, hicieron un redondel sobre el plástico y se lo llevaron con cemento y todo”, aseguró la víctima, quien confió que, en su opinión, los delincuentes los pintan para luego revenderlos. La misma sospecha habían expresado otras víctimas.
“Después del hecho me enteré de que a varias casas les habían robado enanos de jardín y les comenté a mis familiares que a mí también me había pasado”, sostuvo la mujer.
El relevamiento realizado por LM Cipolletti expuso que en el último mes hubo otros dos robos en ese barrio, uno en el Flamingo, otro en el Pichi Nahuel y dos en el Brentana. Por el escaso valor de las estatuillas, la mayoría de las víctimas no hizo la denuncia. La vecina del San Pablo no fue a la Policía.
“Tenía ese solo, pero ahora me voy a comprar otro y lo voy a volver a poner allí”, confió entre risas la mujer.
7 Los robos de enanos de jardín en apenas un mes
La cantidad de robos resulta llamativa. Por el escaso valor de las estatuas, casi nadie hizo la denuncia y no hay investigaciones formales para determinar quién se los llevó.
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