Policía condenado a 4 años de cárcel por brutal escopetazo
El uniformado le disparó en el rostro a un joven cipoleño durante un control de rutina. La víctima salvó su vida de milagro y padece graves secuelas. Al fallo aún no está firme.
Finalmente, el policía orense Darío San Martín fue condenado a 4 años de cárcel efectiva por el disparo a quemarropa que efectuó con su escopeta antitumultos a un trabajador cipoleño. La sentencia no se encuentra firme y en los próximos días se confirmará si va a impugnación.
Hace una semana, se cerró el juicio de cesura en contra del ex integrante de la Comisaría 26 de Fernández Oro y, el viernes, un tribunal de la Cuarta Circunscripción comunicó la pena que deberá cumplir. En los alegatos, la parte acusadora había solicitado un castigo más severo de 7 años y medio de cárcel.
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San Martín no se encuentra preso y solo cumple pautas de conducta. Debido a que el fallo no está firme, podrá seguir gozando de su libertad y su situación no variará mientras la defensa avance con la presentación de distintos recursos.
El policía orense llegó a juicio luego de una investigación encabezada por el Ministerio Público Fiscal de Cipolletti y la parte querellante, a cargo del abogado particular Iván Chelía. La víctima del hecho es Fernando Sosa, con domicilio en esta ciudad, y quien atravesó un largo período de recuperación tras ser baleado por el uniformado en un control de rutina.
El incidente ocurrió el 10 de octubre de 2021 y Sosa permaneció internado varias semanas por la lesión que sufrió en el rostro. El disparo que recibió fue a escasos centímetros de la cara y le fracturó el maxilar. “La boca me quedó torcida. Si tomo mucha agua fría, me duele”, reconoció en una entrevista a este diario.
Apenas se tuvo un informe completo de las secuelas de la lesión, la fiscalía pudo avanzar con el control de acusación y el posterior juzgamiento de San Martín. Un tribunal integrado por Florencia Caruso, Julio Sueldo y Marcelo Gómez lo declaró culpable por el delito de lesiones graves, agravadas por el uso de arma de fuego y por ser el acusado integrante de una fuerza policial en ejercicio de sus funciones.
Con la definición de la pena de prisión, solo resta que la sentencia quede firme y San Martín deberá cumplirla si es que no se modifica en otra instancia.
Un agente castigado pero en suspenso
Un hecho de características similares al ocurrido en Fernández Oro también llegó a juicio pero se resolvió mediante un proceso abreviado. La causa tuvo como protagonista a un policía de la Comisaría Cuarta, Franco Águila, quien baleó con su escopeta al joven Matías Vásquez en la plaza San Martín durante una gresca.
La pena que recibió el uniformado fue de 3 años en suspenso y una inhabilitación para ejercer cargos públicos por el plazo de 6 años. En un primer momento, el agente había sido detenido por un pedido impulsado por la fiscalía de Cipolletti.
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