Un camionero rionegrino murió al volcar en la ruta 40 en Chubut ¿Quién era?

Un grave accidente con consecuencias fatales tuvo lugar durante la mañana de este martes sobre la ruta 40, a unos 50 kilómetros de Esquel en dirección a la zona de Epuyén, en Chubut. La víctima es un rionegrino que trabaja para una empresa de transporte de alimentos congelados.

La tragedia se desató cuando un camión de transporte de alimentos congelados perdió el control en una zona de curvas pronunciadas, impactó contra el guardarraíl y terminó desbarrancándose por un desnivel y causando la muerte del conductor, que viajaba solo.

"El accidente fue reportado pasadas las 8 de la mañana a través del centro de monitoreo", confirmó a un medio local el Jefe de la Unidad Regional Esquel, Hugo Melipil.

El vehículo siniestrado era un camión Scania que transportaba una carga de productos congelados, entre ellos embutidos y pollo, que quedó esparcida tras el violento impacto y posterior vuelco.

Según trascendió, la víctima fatal es Alejandro González de 39 años, oriundo de General Roca, trabajador de la empresa Surfrigo.

Un sector elevado y con curvas en Chubut

Las primeras investigaciones señalan que el camionero circulaba desde la Comarca Andina con rumbo a Esquel cuando ocurrió el accidente. "Se trata de un sector elevado con presencia de curvas y contracurvas", explicó Melipil.

Un dato relevante es que al momento del siniestro todavía no había amanecido completamente en la zona, por lo que no se descarta que las condiciones de visibilidad y otros factores ambientales hayan contribuido a la pérdida de control del vehículo.

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Tras recuperar el cuerpo del chofer fallecido, peritos intentaban determinar si tenía puesto el cinturón de seguridad y si en la tragedia influyó algún factor climático.

En el operativo de emergencia participaron efectivos de la Comisaría Segunda de Esquel, Bomberos Voluntarios y el equipo médico del Hospital Zonal. También acudieron peritos de la Policía Científica que buscan determinar si el conductor llevaba colocado el cinturón de seguridad cuando se produjo el vuelco.

Si bien el siniestro no contó con testigos directos, fueron algunos automovilistas que pasaban por la zona quienes dieron aviso a las autoridades al advertir la gravedad del accidente.

"El tránsito en la ruta no fue interrumpido ya que el camión quedó fuera de la calzada", aclaró el jefe policial, quien también informó que se montó un operativo para la remoción del vehículo y la recuperación del cuerpo del conductor, que "ya fue retirado del lugar".

Tragedia en el puente Malihue

La muerte del camionero se da poco después de otra tragedia en rutas patagónicas, del lado chileno, que involucró a una camioneta en la que cuatro integrantes de una familia de Bahía Blanca volvián del país trasandino por el puente Malihue, en la Región de Los Ríos.

Como consecuencia del accidente, una niña de 12 años murió y los otros tres ocupantes resultaron con lesiones de distinta consideración.

El siniestro ocurrió El domingo a las 7 de la mañana, en el último día del fin de semana largo, en una zona reconocida por su complejidad vial y las dificultades que presenta en condiciones climáticas adversas. . Según la información aportada por Bomberos, el conductor perdió el control del vehículo debido a la densa neblina que cubría la zona a esa hora de la mañana.

Tragedia en Chile_ una niña argentina murió tras volcar una camioneta en un peligroso puente.jpg

En su declaración ante Carabineros, el hombre explicó que no pudo advertir la continuidad de la carretera al encarar una curva pronunciada, lo que lo llevó a chocar contra una barrera de contención y, posteriormente, a volcar en un sector adyacente al puente, con un importante desnivel.

“Se tiene que bajar muy lento, viras en L para entrar al puente. Por ambos lados es lo mismo, y el río es muy fuerte. Al parecer, está solo una pista habilitada por el accidente. Es un puente bien peligroso”, relató a LMNeuquén un testigo que circulaba por la ruta T-39 poco después del hecho.

Y agregó: “Se tiene que conducir a 60 kilómetros como máximo, pero a medida que vas bajando hay que ir disminuyendo hasta llegar a 40 kilómetros. Es una pendiente bien empinada y por la neblina que había no vieron el final de la curva”.