Si bien rompieron la vidriera de un piedrazo, el llamado de alerta de un vecino de la zona permitió que la Policía llegara a tiempo y evitara el delito. El menor fue entregado a su familia pero el segundo sospechoso quedó tras las rejas a disposición de la Justicia.
El jefe de la Unidad Cuarta de Cipolleti, Daniel Uribe, explicó en diálogo con LM Cipolletti que "el hecho ocurrió a las 3 de la madrugada en la calle Brentana al 271 en uno de los locales de Mundo Importado", dedicado a la venta de bazar, objetos de decoración y juguetes.
El delincuente de 18 años tenía varios ingresos a la comisaría antes de cumplir la mayoría de edad. Se fue directo al calabozo.
En un principio la dupla de adolescentes merodeó el sector para asegurarse de que estaban solos pero fue esta la actitud que los delató. Al ver movimiento extraños, un vecino avisó a la Policía y fue el personal de la Unidad Cuarta la que se presentó en el lugar para identificarlos.
Una vez allí, los delincuentes ya habían logrado romper la vidriera de un piedrazo y se disponían a entrar a robar pero se dieron a la fuga al notar la presencia de los efectivos. No obstante, los intentos de escape fueron en vano porque los atraparon después de unos pocos minutos.
El joven de 15 años fue entregado a su familia pero el de 18 quedó tras las rejas, hace pocos meses había cumplido la mayoría de edad. Uribe informó que el chico "ya tenía varios ingresos en la comisaría el año pasado" pero que no nunca pudieron hacer nada porque era menor de edad. "Ahora, quedó detenido", remarcó.
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