Curiosa orden judicial en Cipolletti: padres se peleaban por la psicóloga de su hijo y los mandaron a terapia

En medio de un conflicto entre padres por el tratamiento psicológico de su hijo, la jueza de Familia Marissa Palacios de Cipolletti decidió intervenir y mandó a terapia a ambos progenitores para mejorar su relación y proteger al niño. La disputa surgió luego de que el padre solicitara una medida cautelar para que el niño continuara su tratamiento psicológico con una profesional designada y no fuera cambiado de escuela, en respuesta a la negativa de la madre de seguir con la psicóloga actual.

El padre, en su presentación, detalló que la madre del niño había comenzado a difamar a la psicóloga que lo trataba e incluso a amenazarla, lo que generó preocupación por el impacto en el proceso terapéutico. Además, denunció que la madre quería cambiar al menor de colegio y que dificultaba que su nueva pareja pudiera retirar al niño de la escuela.

Incluso, el hombre expuso que también plasmó el hecho en una denuncia del maltrato psicológico "que ejerce la progenitora sobre su hijo", ante la Secretaría de la Niñez y Familia de la provincia (SENAF), pero que a la fecha no han efectuado informe alguno.

La jueza analizó la situación, considerando la importancia de mantener la estabilidad en la vida del menor. Si bien constató que la psicóloga ya no estaba brindando tratamiento, lo que dejó en abstracto el pedido del padre sobre la continuidad del tratamiento, la magistrada ordenó que el niño siga asistiendo a su colegio actual, ya que ambos padres coincidían en ese punto.

Mucha tensión y una particular orden judicial

Además de resolver la disputa escolar, la jueza decidió que la mejor solución para el conflicto era que los padres, en lugar de centrarse en la pelea por la psicóloga, se enfoquen en mejorar sus habilidades parentales.

Así, ordenó que ambos inicien un tratamiento psicológico para trabajar en un ejercicio más saludable y asertivo de su rol como padres. La defensora de menores que intervino en el caso respaldó esta decisión, subrayando la necesidad de proteger al niño, quien estaba siendo expuesto a situaciones de vulnerabilidad debido a la tensión entre los padres.

Justicia Cipolletti

Francisco Sánchez Valassina

"Sabido es que los niños y adolescentes conforman un grupo de personas que deben ser objeto de una especial y diferenciada atención, atento su calidad de personas en estado de vulnerabilidad y todas las decisiones que se adopten con relación a los mismos deben obedecer a la finalidad principal de protegerlos, salvaguardar su posterior desarrollo y velar por su interés superior", se justificó en el fallo.