Cayó Chucky y se cierra el círculo por crimen de la abuela

A sólo un día de confirmarse la prisión preventiva de Coco Mori por el brutal crimen de su mamá, en un procedimiento de rutina cayó el segundo implicado en el hecho ocurrido la semana pasada en el barrio Santa Clara. Se trata del hombre identificado por su apodo de Chucky, quien habría participado en forma activa en la golpiza mortal contra Lucinda Gutiérrez y luego se habría apropiado del dinero de la jubilación y ahorros. Precisamente, en la requisa personal, la Policía comprobó que llevaba 39 mil pesos atados “con ligas”, indicaron fuentes allegadas a la investigación.

La detención de Roberto “Chucky” Pacheco, de 38 años, se produjo en Neuquén capital, mientras caminaba por la calle. Al ser consultado por personal de la Comisaría Tercera sobre su domicilio, empezó a dudar y tampoco supo precisar hacia dónde se dirigía. Fue en esas circunstancias que se dispuso su traslado a la unidad policial para confirmar sus antecedentes. A esa altura, la Comisaría Cuarta de Cipolletti y la Brigada de Investigaciones habían desarrollado una intensa tarea que incluyó el contacto permanente con sus pares de la vecina provincia debido a que se presumía que Chucky estaba oculto en algún aguantadero neuquino.

Los policías de la Tercera no sólo comprobaron que Pacheco registraba un pedido de captura, sino que en una pierna, debajo del pantalón, llevaba adheridos varios fajos de billetes por casi 40 mil pesos. Mientras que el dinero fue secuestrado, los efectivos se comunicaron con la Policía rionegrina para notificar la detención e inicio de trámites para su traslado a Cipolletti.

De esta forma, la Fiscalía de Delitos contra las Personas de Cipolletti podrá solicitar una nueva audiencia de formulación de cargos y pedir la preventiva para Pacheco, quien seguramente enfrentará una acusación por homicidio calificado.

Una fuga que no duró demasiado

En un primer momento de la investigación, hubo malestar por la “trascendencia mediática” del nombre de Chucky, debido a que lo podía alertar y permitir su fuga. Sin embargo, el trabajo policial dio sus frutos y finalmente fue atrapado.