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Temporal de viento: la bronca de los padres con Educación

El Consejo Escolar resolvió no suspender la actividad escolar en medio de fuertes ráfagas de viento. Se anunció sobre la hora de entrada. Hubo un incendio cerca de una escuela y, en otra, se rompieron vidrios. El llamativo posteo del Consejo en redes.

Un incendio en cercanías a los tubos de gas que alimentan la escuela 121 de La Falda y vidrios destrozados por el viento mientras los alumnos estaban en clases en la Primaria 248 fueron dos de las situaciones más graves durante el turno tarde, en medio de un fuerte temporal de viento. El Consejo Escolar había resuelto no suspender la actividad, a diferencia de otras situaciones similares, y muchos padres manifestaron su bronca.

El enojo con las autoridades educativas comenzó a manifestarse en redes sociales, por la falta de definición sobre la actividad escolar durante la tarde. La demora en notificar a las autoridades escolares para que maestros y padres supieran si se suspendía o no la actividad fue motivo de críticas.

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Muchos padres terminaron resolviendo por su cuenta no llevar a los niños, lo que se evidenció en el alto ausentismo que registraron las escuelas.

Ya pasado el mediodía, finalmente, el Consejo anunció que no suspendería la actividad. Lo hizo publicando una captura de pantalla con un artículo de LMC, y asegurando: "En relación a la nota que circula en los medios sobre suspensión de clases es falsa". Las autoridades educativas, al parecer, no se percataron que la publicación era de septiembre de 2019. Cuando hicieron el posteo en el Facebook oficial del Consejo, LMC ya había informado la decisión de dictar clases.

La demora y la mala comunicación de la medida fueron el primer punto de cuestionamiento por parte de muchos padres de estudiantes cipoleños, sino apenas el principio. Quienes llevaron sus hijos a la escuela luego denunciaron que un incendio de pastizales en la zona de La Falda se extendió hasta quedar muy cerca de los tanques de gas de la escuela 121, por lo que hubo temor por explosiones.

Poco después, desde la Escuela 248 pidieron a los padres que fuesen a retirar a sus hijos ya que producto de las fuertes ráfagas de viento se rompieron los vidrios de aulas con pequeños en clase.

El malestar de los papás se basó, según relataron muchos de ellos, en que habitualmente el Consejo suspende en forma preventiva las clases ante el primer alerta y este jueves se decidió abrir las escuelas cuando el viento fuerte ya había comenzado.

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