Vendía empanadas y perdió su horno y freezer: ahora será indemnizada
Una emprendedora del Alto Valle demandó a la distribuidora de energía tras sufrir graves daños en su local por las bajas de tensión que arruinaron su equipo y mercadería.
Una historia de esfuerzo, reclamos y perseverancia tuvo un desenlace favorable para una emprendedora del Alto Valle. Una mujer que se dedica a la venta de empanadas logró que la Justicia rionegrina reconociera su derecho a ser indemnizada por los daños ocasionados en su comercio debido a fallas reiteradas en el suministro eléctrico. La empresa Edersa fue condenada a pagar los perjuicios ocasionados tras años de deficiente prestación del servicio.
El caso ocurrió en General Roca, donde la comerciante soportó durante meses las bajas de tensión que afectaban el normal funcionamiento de su local gastronómico. Primero se quemó un horno eléctrico, lo que la obligó a cerrar el negocio durante 15 días y afrontar los costos de reparación por su cuenta. Poco después, los inconvenientes continuaron: la cámara frigorífica comenzó a fallar y, pese a sus reclamos, terminó por quemarse. La mujer perdió toda la mercadería y nuevamente tuvo que desembolsar dinero para reparar el motor del freezer.
Te puede interesar...
A lo largo de ese tiempo, la emprendedora efectuó múltiples reclamos ante la Empresa de Energía de Río Negro (Edersa), tanto por vía telefónica como de manera presencial. También presentó un informe técnico elaborado por un electricista matriculado, junto con los comprobantes de todos los gastos realizados. Ante la falta de respuestas, recurrió a una mediación y luego radicó una denuncia formal ante el Ente Provincial Regulador de la Electricidad (EPRE), en la delegación Cipolletti.
La intervención de la Justicia
La causa llegó al fuero Civil, donde el tribunal de primera instancia determinó que Edersa era responsable por los daños ocasionados. Sin embargo, la empresa apeló la decisión, argumentando que las oscilaciones de tensión se encontraban dentro de los parámetros normales y que los problemas respondían a fallas internas en el comercio. También señaló que los instrumentos utilizados por la usuaria no tenían certificaciones válidas y que los cortes registrados habían sido generales, sin incidencia directa sobre el local.
Pese a estos argumentos, la Cámara de Apelación Civil de Roca ratificó el fallo inicial y confirmó la condena contra la distribuidora. Los jueces consideraron que la empresa incumplió resoluciones administrativas previas que la obligaban a reparar los daños o compensar económicamente a la afectada. Además, un peritaje confirmó que la instalación eléctrica del local se encontraba en condiciones adecuadas, descartando cualquier responsabilidad de la comerciante.
El tribunal sostuvo que la distribuidora actuó de manera omisiva, negligente y abusiva, al ignorar los reclamos de la usuaria y desatender las disposiciones del EPRE. Subrayó que la prestataria del servicio no aportó pruebas suficientes para eximirse de responsabilidad y que su conducta vulneró los derechos de los consumidores establecidos por la legislación vigente.
La sentencia, ahora firme, representa un precedente relevante en materia de defensa del consumidor y prestación de servicios públicos. Para la mujer roquense, en tanto, el fallo implica no solo una reparación económica, sino también un reconocimiento a su persistencia frente a una situación que afectó directamente su fuente de trabajo y su sustento diario.
Leé más
Incendio forestal en el Parque Nacional Lanín por descargas elécricas
Extrema crueldad animal: atropellaron a un perro y lo tiraron vivo por un precipicio
Murió un soldado del Ejército Argentino cuando realizaba prácticas de natación
Noticias relacionadas
Lo más leído













Dejá tu comentario