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Procesan al dueño del geriátrico "San Gabriel" por homicidio culposo

El 9 de julio de 2013 falleció un abuelo producto de un incendio que se originó en la dependencia de calle Juan XXIII al 700.

Cipolletti.- El Juzgado de Instrucción Nro 6 de Cipolletti dictó el procesamiento por homicidio culposo en concurso ideal con lesiones culposas para Pablo Pereira, dueño del Geriátrico “San Gabriel” donde falleció un anciano  el pasado 9 de julio de 2013 producto de un incendio. 

El hecho que se le endilga a Pereira se habría desencadenado alrededor de las 19,40 horas en el geriátrico ubicado en calle Juan XXIII al 700 en circunstancias que por la precariedad de la instalación eléctrica se inició un incendio en la habitación donde dormían Moral Catalán, quien resultó víctima, y Víctor Medina.

De la investigación surge que se habría conectado un caloventor a un enchufe que se encontraba debajo de la cama de de la víctima, generándose momentos después un cortocircuito. “Como consecuencia de dicho siniestro se produjo el fallecimiento de Moral Catalán y la propagación del fuego por el resto de las dependencias, generando lesiones en otros abuelos” sostuvo el resolutorio.

Los policías intervinieron a partir que fueron alertados por la encargada del geriátrico de que se había iniciado un incendio en el lugar. 

Al llegar al lugar se encontraba la responsable del Hogar, quien les habría manifestado que restaban sacar varios abuelos del interior. A pesar de la dificultad para ingresar, los policías pudieron entrar. Allí habrían podido escuchar los pedidos de auxilio provenientes desde una de las habitaciones que tenía dos puertas una de las cuales estaba cerrada y la otra bloqueada por una cama.

Al romper la puerta pudieron ver a un "abuelo" tapado con una frazada debajo de una de las camas, logran sacarlo, pero se encontraba en grave estado ya que presentaba problemas para respirar.

Aunque fue llevado al Hospital de inmediato, no logró salvar su vida; los demás abuelos resultaron afectados por la inhalación de humo afectándoles sus vías respiratorias al igual que la de los empleados policiales.

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