El clima en Cipolletti

icon
35° Temp
21% Hum
LMCipolletti Testigos

Testigos protegidos en el juicio por Otoño Uriarte: una apuntó a Antilaf y otro a Lagos

Fueron pedidos por la parte acusadora y pidieron que no se publicaran sus identidades ni les tomaran imágenes. Involucraron a dos de los acusados.

Dos testigos protegidos fueron los protagonistas del juicio por la desaparición y crimen de Otoño Uriarte en la audiencia realizada este miércoles.

Ambos fueron propuestos por la Fiscalía y la Querella, desde donde se había anticipado que tendrían una relevancia tal que permitiría sostener su teoría acusatoria contra los imputados.

Te puede interesar...

Pero como manifestaron sentir temor por posibles represalias y porque una de ellas manifestó que "no quiere quedar expuesta en las redes sociales", con sus datos e imagen, y pidieron que sus declaraciones se prestaran sin presencia de la prensa.

Sin embargo el planteo fue rechazado por los abogados defensores. Pero el tribunal resolvió, tras un cuarto intermedio, permitir que los medios informativos permanecieran en la sala. Aunque por gestión de la abogada Gabriela Prokopiw, quien se ocupó de hablar con los periodistas para que tomaran notas sobre el contenido de lo que hablarían, aunque sin tomar fotos ni videos de ellos.

juicio otoño uriarte audiencia 5.jpg

La primera en prestar testimonio fue una mujer que apuntó al Gato Germán Antilaf. Relató que fue pareja de Martín Cañuqueo (también citado a declarar), amigo de los acusados, y que una noche fueron de visita a la casa de Eva Quintana (también convocada) donde llegaron Nestor Cau y José Jafri (hermanos por parte de madre).

Dijo que bebieron cervezas y tomaron cocaína, y que en un momento Cañuqueo preguntó por el Gato Antilaf, y que alguien dijo que se había ido a Chile “porque se le había ido la mano con Otoño”.

No pudo determinar quien hizo el comentario, pero sostuvo que además comentaron como había sido el hecho aunque no recordó detalles porque “me puse muy nerviosa y me bloquee”.

juicio otoño uriarte dia 2 (5).jpg

Agregó que esa noche al retirarse su ex le advirtió que no tenía que hablar al respecto porque “iba a ser jodido”.

Esto se lo contó por primera vez hace cerca de dos años, indicó, a Prokopiw, a quien contactó por las redes sociales. Expresó que decidió decirlo porque “creí que era lo correcto”. Lo que dijo también lo declaró a la fiscalía.

“Hasta el día de hoy tengo miedo, por eso mi identidad reservada”, explicó.

El abogado de Antilaf, Carlos Vila, advirtió una contradicción con lo que había manifestado en la Fiscalía. Le recordó el acta de esa declaración en la que no mencionó a Chile afirmó que el Gato se había ido a Allen tras ser liberado de prisión.

También expresó que con Cañuqueo terminó “muy mal” porque sufrió violencia de género.

Amigos del delito

El otro testigo protegido fue un muchacho que involucró Maximiliano Manuel Pachi Lagos, de quien es amigo, compadre y además “salían a delinquir juntos”.

Precisó que robaban casas y que estuvo preso por esas andanzas, y que en la actualidad está alejado del delito, dedicado a trabajar.

Relató que en una cena que compartieron en su casa, Lagos, le contó que había participado en el secuestro de Otoño.

Sostuvo que su tío Cacha Pelada, un famoso delincuente de Allen asesinado a tiros hace años, junto a su pareja conocida como La Turca (hermana de la mamá de Lagos) le habían pagado para secuestrar a la adolescente y que la habían llevado a la casa “de unos hermanos” (por Cau y Jafri), donde la retuvieron forzada unos días “hasta que Cacha Pelada les dijo que se tenían que deshacer de ella” porque se había complicado. Puntualizó que la casa fue donde apareció una bicicleta.

juicio otoño uriarte dia 7 (3).jpg

Detalló que “Maxi” le contó que la habían matado por estrangulamiento y que el cuerpo la habían ido a enterrar a una chacra, pero como los rastrillajes estaban cerca la cambiaron de lugar, a otra chacra que no recordaba donde.

En uno de esos lugares donde estuvo enterrada dijo que le tiraron cal y maderas para prender fuego, pero que no lo lograron.

Después, agregó, la subieron a un auto Peugeot y que la tiraron a un canal.

Respecto al motivo del asesinato, dijo que fue por “una deuda”, aunque no supo deuda de qué ni el monto.

Entre Lagos y Cacha Pelada

Esa noche dijo que además de él y Lagos estaba su esposa Laura Valenzuela y otra chica que no recuerda su nombre. Mientras que su esposa de ese momento, Brenda Garrido, había ido a la casa de su madre.

Y que Laura le dijo “aha osea que estoy con un mataconcha”, y le tiró un manotazo. Ahí se terminó la charla.

Destacó que creyó en su relato. “No tenía necesidad de mentir”, aseveró.

Además remarcó que Lagos tenía información del caso porque iba a las marchas por Otoño, porque eran amigos.

Admitió que no habló con nadie del incidente. “A la policía no iba a ir”. Hasta que se lo contó a su madre y a su hermana, quien contactó a la abogada Prokopwi.

juicio otoño uriarte dia 2 (7).jpg

Posteriormente, agregó que en una oportunidad iban en un auto junto a su padre y Lagos habló de lo mismo. Entonces decidió alejarse de él.

Después él se separó de Brenda Garrido, quien era su pareja “porque la engañaba”, y se fue a vivir a Neuquén con quien era su cuñada (hermana de Brenda).

Afirmó que “hace poquitos días” Lagos lo fue a visitar “como tres veces en una camioneta”.

Los abogados de Lagos, Edgardo Lucero y Manuela Castro, ahondaron en la relación que existía entre su defendido y Brenda Garrido, y el respondió que eran amigos, aunque dejaron flotando una posible infidelidad y motivo de su encono con su antiguo compañero delictivo.

Pero además le recordaron una declaración que grabó Prokopwi en la que dio otra versión de los hechos.

Pasaron el audio y en él expresó que el asesino de Otoño había sido Cacha Pelada.

Leé más

Noticias relacionadas

Dejá tu comentario