Tiene que trabajar en una guardería canina por maltratar salvajemente a su perro
Lo filmaron cuando castigaba al animal en su casa de Fernández Oro. Confesó en un juicio abreviado y lo condenaron a 15 días de prisión y pautas de conducta, entre ellas el trabajo comunitario.
Quince días de prisión en suspenso fue la condena que recibió un hombre de Fernández Oro por maltratar de manera salvaje a su perro. La pena, que no lo lleva tras las rejas, surgió en un juicio abreviado en el que el acusado admitió su culpa, e incluye el cumplimiento de pautas de conducta durante dos años. Entre ellas la realización de trabajos comunitarios.
Los ataques se registraron antes del 11 de septiembre de 2022 en una vivienda de la localidad rionegrina. Un vecino lo filmó y las imágenes llegaron a las autoridades policiales y a los integrantes de APAFO (Asociación Protectora de Animales).
Te puede interesar...
El video mostraba cuando Franco Ibarra golpeaba a Milo, un ejemplar macho oscuro de tamaño mediano, de tan solo seis meses de edad. Le pegaba con una rama de árbol en reiteradas oportunidades, para luego tomar una soga, la que envolvió en su cuello y lo levantó en el aire, provocándole ahorcamiento.
Ese mismo 11 de septiembre una comisión de la fuerza fue hasta el domicilio de Ibarra, ubicado en el barrio Costa Esperanza para constatar la versión. Y cuando le informaron el motivo de la visita respondió: “Tanto lío por un perro de mierda”. En ese momento lo quiso agarrar, pero el animal escapó hacia el exterior del terreno, donde fue puesto a resguardo de los uniformados.
Aún más, le pidieron la documentación que identificara el can y dijo “no tengo nada, no pienso darles nada, llévense el perro de mierda si quieren".
El sujeto fue esposado y trasladado a la unidad policial en calidad de demorado. Luego lo liberaron, pero quedó imputado por el delito de “crueldad animal”, al considerarse que “lastimó, torturó y causó sufrimientos innecesario”.
Una veterinaria que revisó la mascota certificó se encontraba en buena condición corporal, aunque notó la presencia de parásitos externos, como garrapatas.
Sin embargo aclaró que presentaba lesiones en el hocico con inflamación nasal y maxilar de ambos lados con hematomas. Agregó que tenía dificultad para respirar por nariz y cerrar la boca producto de la inflamación. También reveló dolor en la espalda dorsal una protuberancia compatible “con un callo oseo de fractura ya resuelta”. Le recetó medicamentos antiinflamatorios recomendó continuar con los controles.
Propuesta de juicio abreviado
A fines de abril último se llevó a cabo una audiencia, en la que la fiscal Rocío Guiñazú Alanis y el defensor Oficial Mario Nolivo comunicaron que habían consensuado cerrar la causa en un juicio abreviado.
El acuerdo establecía imponerle 15 días de prisión condicional -sin ir preso- con el cumplimiento de medidas de comportamiento por el término de dos años, y pagar las costas del proceso. La propuesta era factible porque el sujeto no contaba con antecedentes condenatorios.
Ibarra aceptó la resolución conversada, con lo que quedó asentado que asumía su culpa.
El juez Marcelo Gómez avaló el planteo de las partes y dictó el fallo como lo presentaron. Destacó la confesión del imputado y la prueba reunida por la fiscalía, como el video y fotos que revelaron los maltratos, la declaración de los policías que actuaron en el operativo, de las autoridades de la protectora de animales y de la médica veterinaria que revisó al can.
El caso tuvo un final feliz para el perro, que fue adoptado por el cabo Primer Vásquez, uno de los policías que participó en el operativo de rescate. El uniformado lo bautizó Pol, y no manifestó objeciones respecto al acuerdo entre las partes.
Tareas comunitarias en la Isla Jordán
Entre las pautas consensuadas por el término de dos años, Ibarra deberá realizar 50 horas de trabajo comunitario en la Guardería Canina municipal de Cipolletti ubicada en la Isla Jordán, denominada SOS Animal, precisa la sentencia judicial. Podrá acudir los sábados, y la primera presentación la debía efectuar el 3 de abril último.
También debe asistir cada 2 meses al Juzgado de Ejecución 8 de Cipolletti y someterse al control del Instituto de Asistencia de Presos y Liberados, para informar sus condiciones de vida y estar a derecho.
Las demás pautas son las de rigor: mantener el domicilio y teléfono fijado; no cometer nuevos delitos como tampoco consumir alcohol en exceso ni estupefacientes en la vía pública.
Le advirtieron que en caso de incumplimientos le revocarán la condicionalidad de la pena, la que quedó firme y no podrá ser apelada, lo que también fue establecido en la convención.
Leé más
Seguí en vivo el juicio a policías por el crimen de Jorge Gatica
Crimen de Julián Dobra: datos sobre el auto y su departamento podrían cambiar la investigación
Noticias relacionadas
Dejá tu comentario