Asaltantes les robaron celulares y los extorsionaron para recuperarlos

Dos delincuentes armados y a cara descubiertas se apoderaron de cuatro celulares, un posnet y otro dispositivo de una aplicación de pagos de la pizzería La Oveja Negra, ubicada en la circunvalación Perón 608. El atraco se registró el miercoles minutos antes de las 23.

Andrés, el propietario del comercio, explicó que los ladrones llegaron caminando y a los gritos e insultos y los amenazaron con una arma de fuego de puño que llevaba uno de ellos, mientras que el otro blandiendo un cuchillo de cocina los hicieron tirar al piso y les exigieron dinero.

Pero como no tenían efectivo ya que trabajan mayormente con billeteras virtuales, los apuraron para que les entregaran los teléfonos, perteneciente a uno de sus hijos, dos amigos que lo acompañaban y una empleada.

Luego tomaron los dispositivos para el pago de la mercadería, dos botellas de vino y una pizza y se fueron como vinieron, caminando. Sin embargo, sospechan que los estaban esperando en un vehículo a pocas cuadras.

Los damnificados tenían en sus teléfonos la aplicación Life 360, con la que se pueden rastrear por GPS y ese dato se les proporcionó a los policías que acudieron ante el pedido de auxilio.

Con el acompañamiento de un uniformado siguieron la señal, que los llevó hasta una casa de un barrio cercano. Pero cuando le pidieron al efectivo que actuara, les explicó que debía contar con la autorización judicial para realizar un allanamiento, por lo que debieron retornar con las manos vacías.

No obstante, Andrés contó que no quedó conformó, volvió al lugar y golpeó las manos. Lo atendió un joven quien, al ser advertido que el receptor marcaba su vivienda, admitió que tenía tres de los celulares, pero aclaró que se los devolvería a cambio de dinero.

Resignado, porque el monto que le pedía -“algo más de $50 mil”, dijo- era menor al costo de los celulares, no tuvo que otra salida que pagar la extorsión.

Temor en el sector

El comerciante sostuvo que hay mucha inseguridad en el sector, pero que en los últimos meses se incrementaron notablemente, por lo que el vecindario vive con el corazón en la boca. Sobre todo, advirtió, se torna peligroso cuando cae la noche, aunque se han registrado sucesos a plena luz del día.

En su caso, resaltó que no es la primera vez que sufren el ataque de delincuentes.

Relató que hace cerca de 3 meses le robaron una camioneta Renault Duster de la puerta del negocio y alrededor del mediodía. También tuvo que ingeniárselas para encontrarla y para eso buscó autopartes en las redes sociales, porque temía que la hubieran desarmado y vendido por partes.

Pero tuvo suerte, porque un amigo que forma parte de la policía neuquina experimentado en trabajo de campo, logró recuperarla. Estaba estacionada en un sector de la zona céntrica de la vecina Capital.

Más desalentador fue cuando lo asaltaron tres días después de haber inaugurado el local, cuando las restricciones de la pandemia de COVID comenzaron a flexibilizarse.