El municipio todavía no presentó su presupuesto para el 2024

Existe inquietud en el Concejo Deliberante por la demora en la presentación de tres proyectos centrales para la próxima gestión municipal. Se trata del presupuesto de la comuna para 2024, la ordenanza tarifaria con los nuevos valores para las tasas y demás obligaciones, y el futuro organigrama de gestión, ninguno de los cuales está disponible aún para los ediles.

En particular, la preocupación e, incluso, el malestar que se observa, tiene que ver principalmente con la iniciativa presupuestaria, que se tiene que enviar al Legislativo cipoleño como máximo el 31 de octubre de cada año.

Esto figura como una obligación en la Carta Orgánica Municipal, aunque hay ejercicios en que se ha pasado de la fecha.

Es lo que está ocurriendo en el actual período, a pedido del Ejecutivo comunal, al cual los ediles le otorgaron como plazo hasta el jueves 30 de noviembre para cumplir con la iniciativa.

El hecho es que el proyecto presupuestario no ha sido incluido en el orden del día de la sesión de hoy y no hay posibilidad de que se le dé ingreso en la jornada por el reglamento vigente.

Por eso, a los ediles no les quedará otra opción que convocar a una nueva sesión especialmente para dar entrada a la iniciativa y cumplir así con sus obligaciones.

El concejal opositor Carlos Martínez Larrea ha sido uno de los que se han expresado abiertamente sobre la situación, reprochando que se está al filo de la finalización del plazo otorgado al Ejecutivo sin contar con los números propuestos para el año que viene.

Es más, el edil destacó que lo ideal es que se cumpla siempre con lo que dispone la Carta Orgánica y no tener que recurrir a prórrogas para su elevación al CD.

Por su parte, la titular del Deliberante, Silvana Larralde, confirmó ayer que no se había recibido la iniciativa y manifestó su predisposición a convocar a una nueva sesión en los pocos días disponibles de esta semana o llamarla durante la próxima, mientras dure el mandato de la actual composición del cuerpo legislativo.

Se supo, además, por fuentes del CD, que el malestar tendría como uno de sus motivos centrales el hecho de que hubo varios meses entre la elección en abril de las nuevas autoridades municipales y la actualidad para que la administración saliente y la entrante se pongan de acuerdo en las cuentas.