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Vuelve a entusiasmar el anuncio de ampliación del jardín de María Elvira

Provincia lanzó la convocatoria para ejecutar la obra, que tendrá un costo de casi de 3.5 millones de pesos. Es la tercera convocatoria. En la particular institución, que está en tres barrios, los alegró la noticia. Aunque con mesura, por las experiencias anteriores.

El gobierno rionegrino lanzó nuevamente la licitación para ampliar el Jardín de Infantes Integrado Nº 99 de Colonia María Elvira, el barrio que se expande en un sector de chacras ubicado sobre la costa del río Negro, a unos 7 kilómetros del centro de Cipolletti. El establecimiento funciona en un sector del edificio de la escuela primaria 142, pero además la institución tiene la particularidad de poseer salas en los barrios Puente 83 y Labraña.

La obra tendrá una inversión de 3.483.332,27 pesos, con financiamiento del Ministerio de Obras y Servicios Públicos de la Nación, a través del denominado Programa Fondo Nº 46.

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El llamado lo aprobó la gobernadora Arabela Carreras mediante un decreto publicado recientemente en el Boletín Oficial. El documento establece que el próximo 10 de junio se realizará el acto de apertura de los sobres con las ofertas, y que los trabajos se deberán desarrollar en un plazo de 180 días.

También ordena la creación de una Comisión de Preadjudicación, que estará conformada por integrantes de la Unidad Coordinadora Provincial, perteneciente al Ministerio de Educación y Derechos Humanos provincial. Los miembros ocuparán cargos de Coordinador General, Responsable de Área Técnica, y Apoyatura Legal.

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La noticia de la licitación sorprendió gratamente a la directora del establecimiento, Adelina Núñez, aunque con mesura, pues recordó que es la tercera vez que anuncian el mismo trámite.

La primera ocasión fue en 2015, junto con la ampliación de la escuela que los alberga, la 142. Dos años después, en 2017, volvieron a realizar la convocatoria de empresas, pero en ambas ocasiones no se registraron avances.

De todos modos, la docente no ocultó su entusiasmo ante esta nueva convocatoria, y destacó que “es un logro de la comunidad educativa que lleva años reclamando”, pues funcionan con la incomodidad de estar en casa prestada desde hace años.

“Una alegría que nos hayan escuchado”, resaltó en el mismo sentido. Ahora esperan también brindar su opinión respecto a las obras a realizar, que entienden que no será de gran magnitud por el monto asignado.

Destacó que el anhelo es contar con otra aula, baños para chicos y docentes, cocina y un salón de usos múltiples, aunque tampoco tienen oficinas para Dirección ni para Secretaría.

Solo disponen dos aulas, una improvisada entre un pasillo y otra sala de la escuela 142. Mientras que con sus anfitriones compartían la cocina, hasta que por el COVID se implementaron las burbujas en el protocolo para contener los contagios.

Núñez destacó que es sumamente necesario dotarlo de una estructura acorde al crecimiento de la matrícula que registran en los últimos años, al ritmo de los asentamientos en enclaves cercanos como Isla Jordán, Puente 83, Tres Luces y un amplio sector de chacras. Actualmente registran 56 alumnos, y 122 en total.

Tres en uno

Las otras dos divisiones de la institución tampoco trabajan con comodidad debido a las limitaciones edilicias mencionó Núñez, quien cumple su cargo de manera itinerante, pues habitualmente debe recorrer las tres instalaciones, y lo hace en su vehículo particular.

En el barrio Labraña ocupan el Centro Comunitario, donde se realiza el resto de las actividades vecinales. El salón lo convierten en sala infantil en turnos mañana y tarde. En ocasiones han tenido que suspender las clases, como cuando tienen que velar a algún vecino. Aquí también reclaman su propia sede desde hace tiempo.

Mientras que en Puente 83 también comparten el edifico con la escuela primera 285, situada sobre la ruta 65. El lugar que tienen es un poco más cómodo, pero también les resultó reducido, agregó la directora. De hecho, la dirección la instalaron en un depósito.

“Tenemos muchas necesidades y lo edilicio siempre quedó relegado”, advirtió.

Resaltó que las tres sedes están asentadas en barrios que padecen postergaciones, donde todo se torna más difícil por las inclemencias climáticas invernales. Notó que muchos de sus habitantes se dedican a tareas rurales o trabajos informales, y que también se observan desocupados.

La docente reveló asimismo que es materia de análisis la solución de fondo. Por un lado, consideran la alternativa de construir un edificio espacioso para albergar a todo el alumnado, quienes deberían ser trasladados en colectivo desde los diferentes sectores de residencia. Pero por otro también imaginan un jardín confortable en cada barrio. Es la opción que creen más acorde, aunque aparezca como un logro lejano.

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