Ratifican que la salita del DVN seguirá en el mismo lugar
Pese a la necesidad del espacio, cedido en forma temporal, el Municipio confirmó a los vecinos que no quitará el espacio en la Delegación hasta que Salud encuentre otro lugar.
Los pobladores del Distrito Vecinal Noreste están muy contentos por el hecho de que el centro de atención primaria de la salud del lugar seguirá funcionando en las mismas instalaciones que venía ocupando en la Delegación Municipal del sector y continuará allí hasta que disponga de una sede propia.
Al parecer, se debió a un "malentendido" la decisión de tomar los muebles y enseres de la salita, sacarlos de las dos oficinas en que se encontraban y ponerlos en un pasillo, como si de un desalojo se tratara.
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Sin embargo, la rápida intervención del referente Víctor Alarcón y de integrantes del Grupo de Trabajo barrial permitió que se esclareciera muy pronto la situación y que se echara atrás un iniciativa que no agradó a nadie en el DVN y en sectores poblacionales de las inmediaciones.
El amague de desalojo ocurrió el lunes. Después de diversas gestiones, la dirigencia vecinal se pudo comunicar, la noche de ese mismo día, con la responsable de la Delegación, quien les expresó que el episodio se había debido a un "malentendido" y que nunca había estado en los planes oficiales sacar al centro de salud del lugar en que se venía desempeñando.
Así las cosas, con las horas, la situación se encauzó y pudo volver a la normalidad. Cabe precisar que el personal del Hospital a cargo del servicio, integrado por un médico, una obstetra y dos profesionales de la enfermería, cumple su labor en el lugar los días lunes, martes y jueves, en horario de tarde.
Mucha gente del DVN y de barrios aledaños como Santa Elena, Santa Marta, Curri Lamuel y El 30 acuden al espacio de atención sanitaria para recibir asistencia.
Desde que se cerró, hace más de dos años, el centro de salud de El 30, los pobladores de toda esta amplia zona no tuvieron más alternativa que concurrir al Hospital, del que los separan varios kilómetros.
Por eso, cuando el año pasado se abrió la salita del DVN hubo mucha alegría y satisfacción. Del mismo modo, a nadie le gustó, cuando se enteraron, que podía dejar de funcionar la dependencia que empezó a prestar sus servicios el año pasado en la Delegación Municipal.
El dirigente Víctor Alarcón puso de relieve este jueves la inmediata reacción de la comunidad y la rapidez con que actuó el Grupo Vecinal como factores determinantes para que no se pudiera concretar la pérdida del servicio conseguido, tras el llamativo "malentendido" que se dio. Y es que se comenta que el lugar que se quiso desalojar aparentemente se iba a destinar al área de Tránsito del Municipio.
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