La falta de mano de obra complica la poda de las chacras
La pandemia impidió la llegada de trabajadores temporales. En Cipolletti hubo un curso para formar nuevos peones rurales.
En la recta final de la poda, la falta de mano de obra se hace sentir. Desde la Federación de Productores aseguran que hasta un 50% de las chacras puede quedar sin ser podada como corresponde ante la falta de personal calificado. La escasez de mano de obra calificada en la región es un problema recurrente para la actividad frutícola, pero este año la situación es crítica porque la pandemia de coronavirus impidió la llegada de trabajadores temporales.
"Los que pueden se están enfocando en la pera. Pero no se va a poder podar todas las chacras. Falta mucha gente, nadie quiere trabajar en las chacras", dijo el chacarero José Gardía, integrante de la Federación.
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Se estima que en la región se necesitan 20 mil peones rurales para hacer la poda, cifra que se cubre habitualmente con trabajadores golondrina. Desde el INTA advirtieron la situación cuando la cuarentena comenzó a extenderse y diagramaron cursos junto con los municipios, que en Cipolletti se realizaron con cupos agotados. Sin embargo, se ejecutaron durante agosto, sin tiempo para sumar mano de obra a las chacras.
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