Reparaba instalaciones eléctricas y sufrió una descarga

Un trabajador fue internado con heridas producto de la descarga eléctrica que recibió mientras trabajaba. Según trascendió, un empleado municipal que pasaba por el lugar fue el primero en asistirlo y permitió el rápido traslado al hospital, donde permanece internado.

La empresa Edersa confirmó el incidente e informó que se produjo al intentar reparar "instalaciones eléctricas vandalizadas" en Santa Elena. "Más allá del costo de reposición y del perjuicio a los usuarios que todo el tiempo se quedan sin suministro, la gravedad del robo de cables y la vandalización de instalaciones es éste, el riesgo a la seguridad pública", manifestó un referente de la empresa distribuidora de energía.

El obrero accidentado este viernes es empleado de una empresa que presta servicios a Edersa. Estaba afectado a la normalización del servicio en la zona rural de la ciudad, en Santa Elena, donde había problemas por un nuevo robo de cables. A pesar de sus conocimientos sobre el sistema y cómo protegerse, en alguna de las maniobras recibió una descarga.

El robo de cables provoca que instalaciones como postes queden electrificadas o que sistemas de seguridad como las descargas a tierra no funcionen. Eso genera situaciones de gran peligro para los vecinos.

En el caso del operario, aún se desconoce la intensidad de la descarga eléctrica que recibió y la gravedad de las quemaduras que sufrió. Según trascendió, fue trasladado lúcido al hospital Pedro Moguillansky de Cipolletti, un síntoma alentador. Permanecía hospitalizado.

En Cipolletti el robo de cables y los destrozos en las instalaciones eléctricas se volvieron moneda corriente. Si bien la zona rural aún es el lugar donde más delitos se concretan, los robos son tantos que ya afectan plazas, escuelas y sectores del ejido urbano.

Esta semana hubo robos en Santa Elena y el miércoles la ciudad pasó varias horas sin agua por un robo de cables en la zona de la estación de bombeo de Aguas Rionegrinas.

En la ciudad hay un trabajo conjunto entre Edersa, la Policía, el Poder Judicial y el Municipio que hace foco en los puntos de venta del cobre robado. Sin embargo, aún no se notan resultados en torno a la cantidad de robos diarios de cables y transformadores.

El ladrón de cables que murió

El robo de cables es una maniobra extremadamente peligrosa que en numerosas ocasiones provoca lesiones a los propios delincuentes. Intervenir líneas eléctricas, generalmente con herramientas metálicas, es una combinación peligrosa. Recientemente, se conoció el caso de Ezequiel Francisco Curaba, un joven de 20 años que se quemó el 90% del cuerpo y murió días después.

El joven ladrón intentó sustraer elementos de alta tensión de un tendido subterráneo en Rosario y recibió la descarga, que le generó quemaduras severas. Desde el Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (HECA) explicaron que, a pesar de ser internado rápidamente, murió por la gravedad de sus heridas.

Curaba se encontraba en situación de calle y no era la primera vez que incurría en un delito. En abril de 2023 fue detenido por encubrimiento simple, cuatro meses después, el 29 de agosto del mismo año, se le imputó una tentativa de robo, según consta en su prontuario.