Bajaron las ventas por el Día del Padre en Cipolletti

Las ventas en los comercios por el Día del Padre, que se festejó este domingo, cayeron un 2 por ciento en la ciudad en relación a la celebración de la fecha el año pasado. Sin embargo, pese al promedio general negativo, hubo rubros que estuvieron algo por encima o en el mismo nivel que en la temporada pasada.

Los números en la ciudad fueron algo peores que los guarismos nacionales, dados a conocer por la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME). Según la entidad, el descenso registrado en el país fue de un 1,2 por ciento.

El relevamiento local lo efectuó la Cámara de Industria y Comercio (CIC), la que, además producir información para su uso institucional, es la encargada en la zona de proveer datos para los cálculos que, para el plano nacional, efectúa la CAME.

José Luis Bunter, titular de la CIC, manifestó sobre el cierre del domingo que el descenso del 2 por ciento de promedio no puede ocultar el hecho de que hubo sectores, como los de alimentación, marroquinería, zapatería y regalería, tuvieron una mejora en comparación con el año pasado, lo que no deja de representar un aliciente en tiempos difíciles para la economía del país.

Además, en está ocasión se han podido observar algunas circunstancias que hacen abrigar mejores expectativas para otras fechas festivas trascendentes y también para la evolución del sector mercantil en el corto y mediano plazo.

Así, se está comprobando que la capacitación en nuevas técnicas y nuevas formas de comunicación y promoción están dando resultado. En particular, todo lo que hace a la formación y preparación para el uso de las redes sociales y de internet para promover productos y concretar ventas está dando cada vez mayores resultados.

Prueba de ello, es que muchas operaciones relacionadas con el Día del Padre se pudieron efectuar a través de la tecnología digital, que se está convirtiendo así en una herramienta poderosa cuyo uso tiende a crecer en forma muy significativa.

Por otro lado, en esta ocasión se observó el fenómeno de un uso muy intensivo de las tarjetas de crédito. Por la inflación y las dificultades económicas generales, hay entre los comerciantes una tendencia a no favorecer la utilización del plástico en las transacciones.

Sin embargo, esta vez, como se sabe que el mes que viene es el del aguinaldo, los vendedores que aceptaron las tarjetas, y fueron muchos, tuvieron ventaja y comercializaron más, ya que la gente, por ese ingreso extra, estaba dispuesta a gastar más de la cuenta. El efectivo que no estuvo disponible ahora, se volverá ganancia tangible en un momento próximo.