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Al DT del Rojo le dieron 28 puntos en los genitales y dirigió por teléfono

"Tenía un susto bárbaro", admite el Guille Doglioli, que en octubre había tenido Covid y el mes pasado puso a Independiente de Neuquén en la final del Regional. ¿Cómo le fue al equipo? ¡Ganó!

Una imagen de Ceferino Namuncurá y un ruego: "¡Protegeme!". Así lucía el estado del celular de Guillermo Doglioli, entrenador de Independiente, la noche del miércoles. Revelaba una situación preocupante para el técnico. Es que al día siguiente lo operaban por un quiste en la zona de los genitales y el pene. Si bien la intervención resultó un éxito, le aplicaron ¡28 puntos! en la sensible zona y más allá del reposo, eso no le impidió dirigir por teléfono desde su casa en la victoria de este sábado por la Copa Neuquén ante Sapere, 2 a 1, en La Chacra. ¡Qué fanático!

"Estaba re asustado, era la primera vez que me opero. No sentí nada, me durmieron enseguida. Pero tenía un susto terrible. Miedo porque es una operación, pero el médico (Pablo Ganum) y las enfermeras son unos genios. Eso sí, me habían comentado que eran dos puntitos y fueron 28", admite con alivio y una sonrisa el DT que puso al Rojo en la final del Regional Amateur el mes pasado.

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Al especificar su problemita de salud, agregó: "Me salió en el pene un quiste, como una ampolla, como una gelatina. Me hicieron una operación en la que cortan toda esa zona, sacan el quiste para que no siga creciendo ni genere complicaciones. Siete días de reposo y los puntos son en la zona de genitales, tronco y cabeza del pene. Haciendo las curaciones correspondientes y hasta el jueves no puedo hacer nada. Ese día me sacan los puntos pero quiero volver antes a trabajar. Ya se mandó a analizar todo", aclara el entrenador que ganó la Copa Neuquén 2019 con Independiente.

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Además contó las dificultades diarias que se le presentan tras la exitosa operación. "Ahora está cicatrizando bien. El tema es el roce, sentarse, moverse, ponerse el calzoncillo. Después para orinar y eso todo perfecto", indica Guillermo, que estuvo dos horas y media en el quirófano.

¡Dirigió por teléfono!

Inquieto y apasionado, ni siquiera esta cuestión de salud privó a Doglioli de dirigir en la nueva victoria, ahora ante el Funebrero, que los mantiene líderes de su zona con puntaje perfecto.

"No pude ir a la cancha, no me podía ni mover. Por el facebook veía el partido y los iba llamando por teléfono a mis ayudantes, que son unas fieras", culmina Doglioli y agradece a Ceferino.

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Guillermo en octubre superó un cuadro de Covid y vende artículos de limpieza para subsistir. Un técnico que le pone garra, en la cancha y en la vida. Por suerte, ya está mejor.

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