Trabajadores de Vea continúan de paro
Los empleados reclaman tener las mismas condiciones laborales que sus pares de Neuquén.
Trabajadores del supermercado Vea mantienen las medidas de fuerza, las cuales contemplan un paro por tiempo indeterminado. El motivo, según manifestaron, es la desigualdad manifiesta de salarios entre los trabajadores que la firma tiene contratados en Neuquén y los de Cipolletti.
El conflicto comenzó, según la delegada sindical Andrea Tateo, porque “los sábados a partir del mediodía y los domingos durante toda la jornada, en Neuquén se pagan las horas al cien, mientras que acá se contabilizan como horas normales”.
Desde la cartera laboral habían dispuesto la conciliación obligatoria, la cual finalizó el martes sin haber llegado a ningún acuerdo.
Esta situación motivó la vuelta al paro, que por estas horas tiene a 23 trabajadores sin cumplir sus funciones. Este dato no es menor ya que en el supermercado son 51.
Por su parte, Juan Morrinson, dirigente de la Asociación de Empleados de Comercio, indicó que “ahora, desde la empresa anunciaron que el supermercado cerrará las puertas durante todo el fin de semana, lo que atenta contra la fuente laboral de los trabajadores, ya que van a sacar personal”.
El conflicto lleva alrededor de un mes, y bajo la consigna “Igual trabajo, igual remuneración”, los trabajadores continúan en las puertas del comercio, en calle 9 de Julio entre Brentana y Sáenz Peña, exigiendo que sean atendidas sus solicitudes.
Desde el gremio aseguran que a los empresarios “parece no importarles el conflicto, ya que ni siquiera se asoman para tratar de entablar algún tipo de negociación”.
Con las puertas abiertas
Si bien un nutrido grupo de trabajadores se encuentra de paro, están también los que desempeñan con normalidad sus tareas.
Por este motivo es que el supermercado permanece con las puertas abiertas, a pesar de la constante y ruidosa manifestación que se realiza en sus puertas.
Está claro que la concurrencia ha disminuido. “Hay muchos que piensan que está cerrado; como nos ven en las puertas manifestándonos con los bombos y las banderas, directamente pasan de largo y van a comprar a otro lugar”, señaló una de las mujeres que permanece en conflicto.
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